El Jueves Santo volvió a ser una jornada de gran devoción en la villa donde uno de los conjuntos iconográficos más queridos realizó su estación de penitencia. Empezaba, pese al viento, con buen pie la tarde dedicada al reencuentro con Nuestra Señora de los Dolores y el Santísimo Cristo de la Caridad. Ambos titulares de la Hermandad de los Dolores volvieron a llenar las inmediaciones de la plaza de Andalucía que minutos antes de las siete y cuarto, ya estaba repleta de cofrades deseando ver uno de los pasos que tiene más seguidores. 

La coincidencia del inicio de días festivos y vacaciones para muchos ciudadanos, hace siempre que el Jueves Santo luzca con todo esplendor y las calles y bares de la localidad estén a rebosar. La gran mayoría va en busca de esta dolorosa que al pie de la cruz sostiene en su regazo a su hijo tras haber sido crucificado, otros disfrutan simplemente del ambiente y trasiego de gente por el centro.

La Semana Santa va avanzando y los días en los que se conmemora la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo van tocando su fin aunque aún queda una jornada por delante donde poder disfrutar de la salida de dos nuevas hermandades en la tarde de hoy, Viernes Santo.

Los Dolores son la antesala de la Madrugá y el ambiente cofradiero se dejó notar desde la salida hasta la recogida en la capilla de la Caridad. Desde allí partían con el sol todavía luciendo, con temperaturas agradables y con un cortejo de aproximadamente 200 hermanos en los que se pudieron ver algunos niños, jóvenes penitentes, un grupo de cuatro mujeres vestidas de mantilla de riguroso luto, y una representación de la Hermandad de la Salud con quien comparten sede canónica.  A buen ritmo fueron desfilando los nazarenos hasta llegar al momento en el que el paso cruzaba el dintel de  la capilla por donde para pasar, la cuadrilla de costaleros guiada por los veteranos Pedro Merino y José Neva, se pone de rodillas para salvar la estrechez de la ermita.  Concluida la maniobra, aplausos de los presentes que reconocen el esfuerzo de una cuadrilla que cuenta cada año con mayor número de jóvenes que se van sumando a los ya veteranos en estas lides.

A los sones interpretados por la banda de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Nuestra Señora de los Dolores y el Santísimo Cristo de la Caridad fueron avanzando para hacer su recorrido habitual, sin cambios y con marchas muy reconocidas entre el público al que le gusta ver la forma de moverse de este paso.

La hermandad que marca el Jueves Santo en la localidad, pudo completar ayer su estación de penitencia al completo disfrutando de un lleno absoluto por las calles y dejando a su paso, una nueva estampa de esta Semana Mayor 2015.