Los dos concejales que componen el grupo municipal de Izquierda Unida, Antonio Franco y Manuel Helices, han abandonado esta mañana el pleno extraordinario convocado con un único punto del orden del día centrado en la aprobación de las ordenanzas municipales de cara al próximo ejercicio 2015.

Dada la importancia de este documento, que regula la carga fiscal sobre los ciudadanos, hasta ahora el equipo de gobierno siempre contaba con los grupos de la oposición (PSOE e IU) para intentar el consenso en la sesión plenaria. Para ello, se establecía una reunión previa en la que se explicaba las bases del documento a socialistas e izquierdistas de modo que estos pudieran presentar alegaciones, sugerencias o modificaciones al planteamiento inicial. Esta vez, según los concejales de IU, no ha sido así y de hecho, sólo dos días antes del pleno municipal celebrado hoy, se les informó en la sesión informativa sobre las ordenanzas del próximo año. 

Para Izquierda Unida, ese juego con la oposición de "ahora sí, ahora no" como una especie de juego a conveniencia de contar con su opinión o no, es una falta de respeto al trabajo que hacen para fiscalizar la gestión municipal y por eso hoy, tras tomar el turno inicial de palabra achacando al delegado de Hacienda, Óscar Curtido, la media verdad sobre la afirmación de la congelación de impuestos y tasas, han anunciado que se marchaban y así lo han hecho.

IU lamenta haberse tenido que enterar por los medios de comunicación de esta decisión del gobierno local de no aumentar las tasas o impuestos para no perjudicar el bolsillo de los ciudadanos, pero le preocupa mucho más que en aquel comunicado que Óscar Curtido envió a la prensa hace unas semanas, obviara que si bien los impuestos iban a congelarse para el próximo año, la tasa por consumo de agua sí va a tener una subida de un 2,2 por ciento en el recibo. Eso quiere decir, explican los concejales de IU, que "el recibo de agua subirá para aquellas familias con más miembros, que son, por lo general, la que más precariedad económica tienen".

Tal y como ya argumentó este grupo de la oposición al tener conocimiento de la intención del gobierno local de congelar los impuestos para 2015, esta decisión no es fruto de "ningún esfuerzo" del Ayuntamiento de Rota sino la consecuencia lógica de que para el próximo ejercicio, el salario de los funcionarios sigue congelado y los intereses  del préstamo solicitado para afrontar el Plan de Pago a Proveedores ha disminuido en más de 2 puntos. 

Para Izquierda Unida, el hecho de que el equipo de gobierno sólo cuente con la oposición para aquellos temas que le interesa de cara a la galería pero no con una intención real de llegar a decisiones consensuadas, es lo que ha colmado el vaso de su paciencia motivo por el cual, han decidido marcharse de la sesión plenaria.

En declaraciones posteriores, los concejales de IU entienden que "se ha ninguneado a la oposición" y que por ello no están dispuestos a consentir "actitudes de menosprecio y desconsideración" hacia quienes forman parte de la Corporación aunque no del gobierno municipal.

Para Izquierda Unida, haber eliminado por parte de PP y Roteños Unidos la reunión previa sobre las ordenanzas fiscales en la que poder sugerir modificaciones, es "una falta de respeto a la democracia participativa y a los más elementales principios y valores democráticos". En esa misma línea, como ya han manifestado en alguna otra ocasión, repiten "que el gobierno local tenga mayoría absoluta le da fuerza en votos pero no la fuerza de la razón democrática", han manifestado.