PREDICAR CON EL EJEMPLO

El Partido Popular es pura contradicción. Hace unos días, ofrecía al PSOE un pacto anticorrupción a nivel nacional. Uno de los puntos de ese pacto sería el no incluir en ninguna lista electoral a nadie que tuviese un juicio oral abierto. Esta consideración no la ha tenido en cuenta a la hora de barajar a doña Eva Corrales como su candidata a la alcaldía de Rota para las próximas elecciones del 2015. Este hecho me hace pensar que, o bien el PP gaditano tiene plena confianza en que los frentes judiciales que su candidata para nuestra ciudad tiene abiertos acabarán en sentencias favorables, o bien ha barajado que los juicios se alarguen en el tiempo y sobrepase la fecha de mayo del año próximo. Desde luego, cada uno actúa en su casa como le viene en gana.

Otra de las contradicciones del Partido Popular en temas que tienen que ver con el campo de la Justicia es la poca o nula contundencia con los suyos. Todos recordamos el caso Bárcenas, donde nuestro presidente le dio su total apoyo hasta el final, hasta que se demostró que se había lucrado a costa del partido. Al parecer, Luis Bárcenas había amagado con “tirar de la manta”, ante la soledad mostrada por algunos de sus ex compañeros y ex compañeras de Partido. Quién sabe si al final destapó algunos casos concretos.

Quizás la contradicción más grande del PP sea la de exigir al conjunto de la ciudadanía un “apretón del cinturón” más allá de lo aceptable. El ministro de Economía “sacaba” una propuesta para contrarrestar y combatir el fraude fiscal, consistente en que se podía “chivatear” de forma anónima aquellos casos de fraude fiscal y laboral mediante una llamada telefónica. Sin embargo, tenía defraudadores en su propia casa. Al parecer, con dinero negro se financiaron las obras de mejoras y/o ampliación de la sede del PP en Madrid. ¿Tiene fuerza moral el PP para exigir comportamientos éticos a la ciudadanía de este país?

A la hora de redactar este artículo ha salido “a la palestra” un caso más de corrupción y fraude que salpica al Partido Político que sustenta al Gobierno de la Nación. La denominada por la policía anti fraude como Operación Púnica se ha extendido hasta más de cincuenta cargos. El más renombrado de “los salpicados”, el señor Granados, antiguo hombre de confianza de Esperanza Aguirre. Rodrigo Rato, Ángel Acebes, Luis Bárcenas, Carlos Fabra, Francisco Granados, Jaime Matas, Marcos Martínez Barazón (presidente de la Diputación de León),...

La apuesta por la regeneración democrática “ya va tarde”. Cada día nos levantamos con la noticia de nuevos casos de corrupción. Terminar con la corrupción política se ha convertido en una tarea primordial. Mucho y bien tendrán que afinar para recuperar la confianza de la ciudadanía. Todavía quedan algunos meses para las próximas elecciones municipales y autonómicas. Es muy probable que afloren nuevos casos de corrupción entre la clase política hasta entonces. Recuperar la credibilidad se antoja tarea complicada. Sobre todo si aquellos que han exigido sacrificios a los ciudadanos, se siguen mostrando condescendientes con todos estos casos.
Salud.