En la tarde de ayer comenzó para la Hermandad de la Veracruz un año muy especial en el que actos, cultos, conferencias, conciertos y exposiciones se sucederán para celebrar el 75 aniversario de su reorganización. Un año completo, desde este septiembre de 2014 a septiembre de 2015, en el que los hermanos veracrucistas rendirán culto a sus titulares a los que deben haber cumplido tres cuartos de siglo gracias al empeño que unos 16 hombres demostraron en 1940.  Aquellas personas que dieron el paso al frente para reorganizar la hermandad han ido pasando el testigo a otros tantos cofrades que se han dejado muchas horas de su tiempo para mantener viva esta cofradía, una de las más antigua de la localidad. Ayer, en el salón multiusos del Palacio Municipal Castillo de Luna comenzaba esta celebración con el descubrimiento del cartel anunciador.

Antes, el presentador del acto, Joaquín Arévalo, contó anécdotas y extrajo fragmentos de historia de esta hermandad para conocimiento de todos los presentes. El Cristo de la Veracruz, decía, fue la única imagen que se salvó cuando en los años de la guerra civil se quemaron capillas, se destrozaron altares, etc. Los que entonces atacaron la iglesia no pudieron  arrancar esta imagen de la pared y gracias a aquello, pocos años después, pudo plantearse la reorganización de la hermandad.  Una hermandad por la que han pasado muchas juntas de gobierno diferentes, hermanos mayores, con altos y bajos, pero que ha permanecido en el tiempo, por eso, este 75 aniversario, teniendo en cuenta los tiempos que corren, es motivo de alegría y satisfacción para los veracrucistas.

Ayer, muchos de ellos, junto a otros cofrades de hermandades hermanas, acudieron al acto que ha sido el pistoletazo de salida de este aniversario. Se recordó la primera salida del Cristo de la Veracruz, en el año 40, con sólo 16 hermanos en Jueves Santo. Todos aportaron lo que tenían para esta salida procesional, humilde pero llena de fervor, el mismo, que decía ayer el presentador del acto, se mantiene con el paso del tiempo. Recordando un escrito de Santiago Grande, una de las personas implicadas en aquellos inicios, la Hermandad de la Veracruz aprovechó para rendir homenaje a cada una de las personas que en estos 75 años han ayudado a la hermandad: bordadores, carpinteros, imagineros, directores espirituales, juntas de gobierno, y devotos que hacían donaciones estuvieron ayer muy presentes para la familia veracrucista porque gracias a ellos, hoy pueden celebrar sus bodas de diamante.

Un aniversario que comenzó con el descubrimiento del cartel anunciador, un primer plano del Cristo de la Veracruz, obra del roteño Manuel Ruiz-Mateos, hecho a lápiz en color, y que refleja el sufrimiento del crucificado que tanto se venera en Rota. El autor, que tomó la palabra, agradeció que haya sido su dibujo el elegido para este magno acontecimiento cofrade y deseó que el resultado final fuera del agrado de todos los presentes.

Acto seguido, se procedió a la entrega de carteles enmarcados para las tres empresas patrocinadoras del mismo y para el autor de la obra.

Ya en el turno de palabra, el presidente del Consejo Local de Hermandades y Cofradías, Gregorio Sánchez,  destacó esta fecha histórica para la Veracruz, mostrando su satisfacción al haber tenido la suerte de haber vivido también el 50 aniversario 25 años antes. Gregorio Sánchez reconoció la antigüedad de esta hermandad posible gracias al empeño y trabajo de muchas personas que apuestan por entregar parte de su tiempo en sacar adelante salidas procesionales, cultos, etc. manteniendo viva la llama de la fe. Para todos los actos que hay programados, dijo el presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías, lo más importante es siempre los titulares a los que se veneran y pidió que no se perdiera de vista esa guía.

Por su parte, el delegado de Cultura, Antonio Izquierdo, felicitó a la hermandad consciente de que es una fecha muy importante para esta cofradía a la que el Ayuntamiento ha mostrado su colaboración. Tras felicitar al autor del cartel y desear una larga vida a la Veracruz, tomaba la palabra el hermano mayor, Juan García Gasca. Este cofrade, de pocas palabras en público, se paró en el capítulo de los agradecimientos al Ayuntamiento, al Consejo de Hermandades, a los patrocinadores del cartel, a la familia Grande, siempre implicada en la hermandad,  y a las juntas de gobierno que le han precedido, pero sobre todo, tuvo especial recuerdo para aquellos hermanos que hace 75 años decidieron la reorganización de la Veracruz y que sembraron la semilla que hoy sigue creciendo. Para Juan García Gasca es todo un orgullo poder vivir tan de cerca este año que se les presenta repleto de actividades y animó a todos los hermanos a participar en la programación que se irá desarrollando en los próximos meses.

Para concluir, la teniente de alcalde Auxiliadora Izquierdo se sumó a las felicitaciones a la familia veracrucista y a todos los que de una forma u otra han ayudado al crecimiento de esta cofradía pese a los tiempos convulsos que vive la religión. Aunque de cara a la galería lo que más destaque son las salidas procesionales y cultos, Auxiliadora Izquierdo no quiso dejar pasar por alto la labor solidaria que esta y todas las hermandades realizan a través de su bolsa de caridad. Labor callada de ayuda a los demás que destacó como un pilar fundamental entre hermanos.

La teniente de alcalde mostró su convencimiento de que la Veracruz llegará activa y viva a sus 100  años y animó a todos los hermanos a trabajar por ello agradeciendo a aquellos que están comprometidos, sus horas de dedicación altruista. 

Con acordes de la banda municipal de música "Maestro Enrique Galán" que se encargó de amenizar el acto, concluía esta inauguración del año especial de conmemoración del 75 aniversario de la reorganización de la Hermandad de la Veracruz. La próxima cita tiene lugar hoy domingo, 14 de septiembre, con el traslado de la cruz primitiva del Cristo desde la capilla de San Roque a la Caridad a las ocho y media de la tarde. Trayecto que se hará con el rezo de un viacrucis por las calles del centro.