Izquierda Unida de Rota, a través de su concejal en la oposición, Antonio Franco, ha salido a los medios de comunicación para explicar de forma pública la postura que su partido ha mantenido con respecto a la disolución de la Mancomunidad de Municipios del Bajo Guadalquivir (MMBG), reivindicando que ha sido gracias a la labor de sus compañeros, como se ha conseguido finalmente disminuir la deuda para las arcas municipales de Rota.

Izquierda Unida se mostró siempre a favor de la disolución de la Mancomunidad para que posteriormente, se intentara negociar con la Junta de Andalucía parte de la deuda que correspondía a varios servicios de los que habían disfrutado sólo algunos ayuntamientos mancomunados. Esa opción, explicaba Antonio Franco, era para su grupo la más rápida y ayudaba a agilizar los trámites para que los trabajadores cobraran sus nóminas pendientes. Sin embargo, lo que se hizo posteriormente fue aprobar la disolución y en vez de negociar con el gobierno andaluz, hacer un reparto de la deuda entre los municipios aunque con unos criterios no del todo justos ya que a Rota por ejemplo, le asignaban el pago de más de un millón de euros por el sellado de un vertedero que no había usado nunca. Fue en este punto en el que se decidió por parte del Ayuntamiento, (PP y Roteños Unidos), a lo que se sumó PSOE, la presentación de unas alegaciones en las que se venía a reivindicar que Rota no pagara ese millón de euros más por algo por lo que no había disfrutado. La opción de IU, que votó en contra de esas alegaciones, era sin embargo, que esa deuda, que en total ascendía a 10 millónes de euros, se negociara con la Junta.

Durante la sesión plenaria, la alcaldesa de Rota, Eva Corrales, reivindicó que había sido la posición "fuerte" y las alegaciones presentadas por PP, Roteños Unidos y PSOE, las que habrían provocado que la deuda del vertedero se eliminara para Rota, sin embargo, al final de la sesión plenaria, ella misma reconoció que esas alegaciones no habían sido tenidas en cuenta. Fue ahí cuando Antonio Franco decidió salir a los medios -ya que la sesión de pleno había concluido-,  para explicar los verdaderos motivos que según él, han provocado esa reducción de deuda.

Según el izquierdista, ha sido gracias a que la Junta ha asumido el pago del sellado del vertedero que habrían estado utilizando sólo Utrera y Lebrija, lo que habría ayudado a que Rota no tuviera finalmente que asumir la parte de deuda que en principio se le asignó por este servicio.

Según Antonio Franco, han sido entonces "realmente" las enmiendas que Izquierda Unida presentó  en el pleno de la Mancomunidad, entre las que se encontraba esa opción de intervención de la Junta, las que habrían hecho, según el concejal de este partido, que la deuda pudiera aminorarse. "Ha sido entonces la labor callada de IU que ha negociado con la Junta y no las alegaciones que la misma alcaldesa reconoce que no han sido tenidas en cuenta, las que han permitido esta reducción de más de un millón de euros", manifiesta Antonio Franco que además informa que la deuda por este servicio estaba cifrada por la Mancomunidad en 10 millones de euros, y que la Junta finalmente la reduce a sólo 6. En este punto, se da la razón a PP y Roteños Unidos que aseguraban que no se podía hacer un reparto de deudas sin conocer exactamente las cuentas y situación económica de este ente supramunicipal.

IU insiste en que su postura inicial habría sido la más consecuente con la situación que presentaba la Mancomunidad de Municipios del Bajo Guadalquivir, que se votara la disolución y se intentara negociar con la Junta algunas deudas "como así ha sido", ha afirmado el izquierdista. De este modo, concluyó, los plazos para que los trabajadores cobren se habrían disminuido.