Noche de estrenos en Cádiz. Por un lado, La Madriguera ponía en escena su obra Arlequino, servidor de dos amos, por otro, el Ayuntamiento gaditano abría al público un magnífico espacio cultural, Entrecatedrales. Ambos, salieron triunfadores.

Los "madrigueros" contaron con un aforo casi lleno y con el calor de un público que le sirvió para minimizar los nervios propios de la primera noche. Una noche típica gaditana a la que no le faltó el alto índice de humedad que proporciona un mar que prácticamente se funde con el escenario.

Sobre las diez y cuarto de la noche se apagaron las luces y empezó el espectáculo. Los seis integrantes de la compañia roteña llenaron el escenario de luz y color con una puesta en escena más propia de un musical contemporáneo que de una obra que data del siglo XVI. Fue una declaración de intenciones y una demostración del magnífico trabajo que ha realizado Antonio Martínez Ares que se ha hecho cargo de la letra y música de esta obra.

El autor gaditano ocupaba una de las últimas filas del patio de butacas y reconoció al finalizar la obra que había pasado nervios pero que el resultado había merecido la pena. "Ellos (los actores) son los que llevan el verdadero peso de la obra, los que sudan la camiseta, mi parte ha sido la más fácil", comentaba, "eso dicen todos los que tienen talento", añadía entre risas el director de La Madriguera, Álvaro Sánchez de Medina.

Las siguientes dos horas estuvieron llenas de teatro de calidad. Unas magníficas interpretaciones acompañadas de un excelente trabajo por parte del equipo técnico consiguieron enganchar a los presentes desde el primer minuto. La impronta gaditana estuvo presente durante toda la representación sobre todo en el lenguaje utilizado por los actores que hacían al público sentir a un Arlequino muy cercano y perfectamente reconocible en Cádiz.

Para La Madriguera, a pesar de que esta obra la han puesto en escena varias veces, la noche del jueves fue especial. Compartir trabajo con el autor gaditano Martínez Ares ha sido para ellos un privilegio que esperan que dé sus frutos en las próximas representaciones.

La de anoche, por ser la primera de este mes de agosto, volvió a poner a prueba a los "madrigueros" que tuvieron que lidiar además con algún que otro percance fruto del teatro más vivo aunque sin duda, supieron saldarlo con la profesionalidad que cargan a sus espaldas desde hace diez años.