Quantcast
1
Sábado, 08 de Febrero de 2014

Balsa Cirrito

[Img #29942]




ROMÁN EL BUENO


 
 

Con estimulante frecuencia veo aparecer en las páginas de este periódico noticias sobre Román Lokati. Y suelen ser buenas noticias. Exposiciones importantes, premios, reconocimientos… Conozco a Lokati desde hace un montón de años y siempre me pareció un artista de talento, y eso pese a cierta condescendencia con la que muchos lo trataban en Rota.
 
El motivo de esa condescendencia era la bonhomía de Lokati. Debido a algún tipo de gen con tendencias no sé si sádicas o masoquistas, los humanos solemos pensar que el talento va unido a la antipatía o, cuando menos, a la presunción. Alguien que no sea un poco chulesco, que no hable con suficiencia o que no trate al resto de los humanos con cierto grado de superioridad indulgente, nos parece que no puede poseer una gran capacidad artística. Lokati es bonachón, no discute casi nunca y ríe los chistes ajenos con alegría, incluso cuando no son muy buenos; de resultas, algunos pensaron que se trataba de un pintor insignificante.

Por supuesto, se equivocaban.

En sus inicios Lokati oscilaba entre el pop art, con toques de Warhol, y un mundo algo almodovariano que recordaba un poco al del grupo Costus. Sus cuadros de aquella época me parecían especialmente adecuados para la cartelería o para la impresión industrial o de publicaciones. Como no podía ser menos, a lo largo de los años su arte ha ido evolucionando. La última exposición suya que vi mostraba a un artista completo, tan dueño de sus recursos que casi daba miedo.
 
Lokati ha logrado algo que sólo consiguen los grandes pintores; esto es, que sus cuadros se conviertan en meditaciones relevantes. Meditaciones en forma de imágenes. Esto parece muy fácil, pero, créanme, no es demasiado frecuente.
 
Un artista debe expresarse con los medios de que dispone, con la sustancia de su arte. Y en el caso de la pintura, debe ser capaz de mostrarnos su visión del mundo sin usar las palabras, sólo con los colores y con el dibujo. Lokati reflexiona con sus cuadros y, a su vez, nos sugiere ideas y sensaciones. Lokati piensa y nos hace pensar. Y lo consigue con un universo estético coherente y múltiple. Pinta grandes cuadros.

En fin, no quiero parecer – Dios me libre – que sufro complejo de crítico de arte de El país, pero tenemos un excelente pintor roteño que, además, es un gran tipo.
   
Se llama Román Lokati.

Comentarios (1) Comentar esta noticia
Comentar esta noticia

Normas de participación

Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.

Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.

La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad

Normas de Participación

Política de privacidad

Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.10

  • ANTONIO

    ANTONIO | Viernes, 14 de Febrero de 2014 a las 10:35:04 horas

    Enhorabuena por el artículo. Es muy necesario que expresemos en público reconocimientos como el que aquí expones. Curiosamente este tipo de comunicaciones no generan comentarios, muchos te habrán dejado de leer a mitad del artículo. Lokati es un gran artista, y merece que sus paisanos se lo reconozcamos. Personalmente no le conozco pero la impresión que siempre me ha dado es coincidente con la definición que realizas.

    Accede para responder

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.