He leído con cierta preocupación que parte de nuestros impuestos se desvían para hacer pagos de minutas a abogados que defienden las causas que tienen pendientes con la Justicia el anterior alcalde y la actual alcaldesa de Rota, Lorenzo Sánchez y Eva Corrales, respectivamente.  Con diecisiete mil euros, que es lo que les cuesta, en principio, sus defensas, el Ayuntamiento de Rota podría hacer bastantes cosas con ese dinero, por ejemplo pagar a proveedores que aún no han cobrado, entre otros destinos.

Con todos mis respetos para los encausados, pero me cuesta creer que el pueblo tenga que saber de este desvío de dinero por las declaraciones efectuadas por el PSOE y publicadas en el periódico digital “Rota al Día” es un flaco favor que este equipo de gobierno de Rota nos hace a la ciudadanía. ¿Sabe alguien de alguna empresa que le haya pagado minutas de trabajos de abogados realizado a un trabajador por un presunto delito o mala gestión en la empresa? Yo no.

Felicidades esta vez al PSOE por aclararnos un poco más los presuntos trapicheos que se hacen en el Ayuntamiento de Rota.

El equipo de gobierno también podría haber publicado este gasto en el portal de Ayto. Rota, diciendo: “Con un gran esfuerzo y a pesar de la situación económica por la que estamos pasando, el Ayto. de Rota paga los gastos de defensa de Lorenzo Sánchez  y Eva Corrales”. No está bien anunciar lo que les beneficia, hay que ser claro, como dice el slogan de los RRUU “Agüita Clara”, la misma claridad que deseamos los ciudadanos y ciudadanas tengan con nosotros los que nos gobiernan.

La otra cara de la moneda es la del roteño del Bar Machuca, en el poligono industrial,  Tino Machuca, que hace posible, con un gesto más que solidario, que trescientas cincuenta familias que están pasando por una mala  situación y precisamente no creada por ellas, puedan saborear un plato de jamón la noche de fin de año. Como siempre, los ciudadanos de a pie  van por delante de la clase política.  Chapó Tino, y felicidades por todos los premios conseguidos y que el último sea el penúltimo.

Feliz año a todos.


Juan Manuel Pizones Rico