La consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía ha emprendido la autorización del aprovechamiento de los recursos pesqueros y marisqueros de Los Corrales de Rota, un paso que pretende ayudar a mantener esa actividad tradicional y artesanal de pesca  en unos espacios declarados como Monumento Natural en el año 2001.

La Junta ha comenzado esta gestión otorgando la autorización al Ayuntamiento de Rota del corral de San Clemente, uno de los ocho existentes en la localidad que ocupan una extensión de 55.700 metros de dominio público marítimo terrestre en la que los pescadores extraen diferentes especies para consumo propio, ya que no se pueden comercializar. La autorización se hace por un plazo de cinco años prorrogable a veinte sólo para la pesca de corral.

El delegado territorial en Cádiz de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, Federico Fernández, ha destacado que estas autorizaciones permitirán "el aprovechamiento pesquero" y "la recuperación de un espacio que ha sido utilizado para la pesca desde la época de los romanos y que mantienen intacto un alto interés ecológico al albergar numerosas especies de flora y fauna".

Con esta gestión, el Ayuntamiento de Rota deberá ahora elaborar un plan de explotación anual y un censo de pescadores a pie de corral, junto a un listado anual con las capturas realizadas. De igual forma, se debe impedir la introducción de especies que pudieran poner en peligro la fauna y la flora autóctona del Monumento Natural.

Federico Fernández tiene la intención de retomar la comisión técnica formada por Junta de Andalucía, Ayuntamiento de Rota y Demarcación de Costas creada tras la declaración del conjunto de Los Corrales como Monumento Natural, para impulsar la recuperación de estas estructuras milenarias y dinamizar su gestión. Una comisión en la que ha dicho, le gustaría que estuviera presente la Universidad de Cádiz, el grupo de  ecologistas y el sector pesquero.

Hay que recordar que en Rota existen ocho corrales de pesca, "Encima", "San José", "Chico", "San Clemente", "Chiquillo", "Corral Hondo", "Corraleta" y "Punta Candor", y que su gestión y mantenimiento fue cedida por la Junta al Ayuntamiento en 2003, dos años después de declararles Monumento Natural.

El corral de pesca es un sistema de pesca rudimentario conocido desde la antigüedad, ya que sus primeros usos datan de la época romana. Consiste en una estructura fija, de piedra ostionera, colocada en la zona intermareal, que se cubre de agua en  marea alta, y se vacía en marea baja cuando el agua se retira por unas aberturas en la estructura, dejando atrapadas las capturas en su interior. En las últimas décadas diferentes motivos provocaron la escasa rentabilidad de la explotaciones y su consiguiente abandono y deterioro. No obstante, Los Corrales siempre han mantenido su interés ecológico y su atractivo turístico, lo que ha generado incluso la creación de asociaciones de gran calado social en localidades como Rota y Chipiona. De hecho, Los Corrales es para el municipio uno de sus principales recursos turísticos naturales. Durante años se ha intentado poner en marcha un plan de uso y gestión para regular el uso de Los Corrales aunque la dificultad de poner de acuerdo a varias consejerías dio al traste con el documento que durante años quedó paralizado. Las asociaciones existentes defienden el cuidado del corral por su alto valor ecológico y cultural.