El pleito en el que están ensarzados el Ayuntamiento de Rota y el de Chipiona por la frontera del término de Costa Ballena entre uno y otro municipio, dará un paso más con la solicitud del equipo de gobierno roteño que elevará a pleno la propuesta de solicitar a la Junta de Andalucía la modificación del término de Rota en Costa Ballena, donde "Rota ha venido ejerciendo pacíficamente y de buena fe" sus competencias urbanísticas, tal y como se recoge en el informe elaborado en 2010 por el Consejo Consultivo de Andalucía.

Con esta propuesta, según han explicado desde el Ayuntamiento, se recurre a la Junta de Andalucía que fue la que impulsó el proyecto urbanístico de Costa Ballena, para que normalice los trámites que dejó pendientes en el desarrollo del complejo, de acuerdo con el informe del Consejo Consultivo.

Con esta gestión, lo que pretende el gobierno local es defender la parte de terreno que Rota ha estado utilizando desde la explotación y urbanización del compleno turístico como parte propia, antes de que el Ayuntamiento de Chipiona reclamara al municipio roteño las 21 hectáreas.
Antes de elevarse al pleno municipal, los grupos de la Corporación municipal dictaminarán su posición frente a esta propuesta en la comisión informativa prevista para este viernes.

El Ayuntamiento solicitará que el lago de Costa Ballena sea la línea divisoria entre Rota y Chipiona tal y como hasta ahora se entendía, y tal y como se plasma en los acuerdos y trámites realizados en todos estos años con la participación de distintos organismos públicos de la Junta de Andalucía.

 
La alcaldesa de Rota, Eva Corrales, considera vital, como hasta ahora, que el consenso de todos los grupos municipales de la Corporación esté presente para defender lo que entiende que es propiedad de los roteños.


Hay que recordar que la última noticia que apareció públicamente sobre este asunto fue el pasado mes de julio cuando el Tribunal Supremo se pronunció dando la razón al Ayuntamiento chipionero desestimando un recurso de casación interpuesto por Rota, dando por válido el deslinde que se recoge en unos documentos de 1873, y que como consecuencia, se perderían unos 210.000 metros cuadrados de terreno ya urbanizados en Costa Ballena por parte roteña que pasarían a ser propiedad de la localidad vecina. Dado que el PGOU de cada uno de los pueblos recoge un deslinde diferente, cada uno barre para casa apoyándose en documentos que le dan la razón. De momento, el Consistorio roteño no está dispuesto a renunciar a lo que cree que le corresponde ya que en ningún momento, tal y como ha comentado la alcaldesa en ocasiones anteriores, Rota ha ocupado de mala fe ningún terreno que no le correspondiera. Por eso, y en vista a cómo se ha ido sucediendo el desarrollo de Costa Ballena con la implicación de varios organismo públicos, pide que se respete las decisiones que se tomaron en su momento y Rota no pierda esta parte de término municipal.