Quantcast
2
Sábado, 18 de Agosto de 2012

Balsa Cirrito

[Img #17328]


YO ME PIDO A DIANE KRUGER



  
    
Digamos que el tipo viene de Estonia. Estonia está lejos de narices, y allí no saben demasiado de España (aunque, por supuesto, mucho menos sabemos nosotros de Estonia). Seguramente allí habrán oído hablar de la selección española de fútbol, de la paella y entra dentro de lo probable - debido a cierto atraso en las modas en los países del Este - que en la discotecas estonias suene todavía el baile de la Macarena. También habrán escuchado hablar estos bálticos de la crisis española. (Lo cierto es que la prensa extranjera habla mucho de nuestra crisis, de tal forma que los guiris de las cuatro partes del mundo suelen creer que nos alimentamos de cáscaras de altramuces y que estamos a punto de desvalijar el Banco de España.) (Personalmente, no me importaría mucho esto último.)

Pues bien, a ese hipotético tipo que decimos que procede de Estonia, lo metemos en un avión en Tallin, lo hacemos viajar, lo bajamos en el aeropuerto de Jerez, le metemos en un coche y le tapamos los ojos con una venda (caray, esto parece El caso Bourne). Conducimos al estonio a Rota, y sobre las nueve y media de la noche, le quitamos la venda y le damos una vuelta por el centro de la ciudad (el coche deberá quedarse dando vueltas porque, sin duda, no encontrará aparcamiento). Y le decimos al estonio, que como es un estonio de cuento, hablará español con absoluta perfección, “esto es Rota, amigo Wladimir, y estamos en crisis”. Entonces el estonio mirará de un lado y a otro, pondrá cara de sorpresa y exclamará, citando a Andrés Pajares, : “¡Y una mierda!”.

Ahora explícale al estonio que esos bares repletos como nunca, que esa muchedumbre que pasea con aire satisfecho, que esas calles con los coches aparcados en doble fila pertenecen a un país que está pasando por la peor crisis económica de su historia; aunque es posible que no terminemos de explicarlo, porque el estonio a esas alturas estará intentando colocarse de camarero.

Entendámonos, estoy seguro que mucha gente lo está pasando mal, pero, francamente, las cuentas no me cuadran. Bien es cierto que en España tenemos una larga tradición de melasoplismo (palabra que procede de la común frase: “me la sopla”). Se suele contar que, durante la Guerra de Cuba, el día que se conoció en Madrid que la escuadra española había sido hundida, la plaza de toros de la capital estaba repleta de gente ansiosa… por ver a Lagartijo y a Chicuelo. Y uno no termina de saber si es que somos estoicos o epicúreos.

Lo que sí es cierto es que he puesto de modelo a un estonio por un motivo. Si en vez de estonio el protagonista de nuestra fábula fuera alemán, el alemán iba a terminar pidiendo que fuéramos nosotros los que rescatásemos a su país, porque, como se comprueba con un vistazo, nadamos en la abundancia. Y tampoco es plan ir rescatando Alemanias (Vale, lo haremos. Yo rescato a Diane Kruger). (Diane Kruger es la pava que sale en Troya y en Malditos bastardos). (Esa misma). (Lo siento, yo me la pedí primero).





Comentarios (2) Comentar esta noticia
Comentar esta noticia

Normas de participación

Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.

Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.

La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad

Normas de Participación

Política de privacidad

Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.10

  • francisca

    francisca | Miércoles, 22 de Agosto de 2012 a las 15:17:50 horas

    Totalmente de acuerdo yo me pregunto a veces de donde saca la gente la pasta para salir tanto y consumir y si te vas a los centros comerciales parece que las cosas la regalan!!

    Accede para responder

  • ROTEÑO

    ROTEÑO | Domingo, 19 de Agosto de 2012 a las 11:12:15 horas

    Parece que te gusta regodearte con la desgracia de los demás. Esta vez le ha tocado a los parados, los miles de ciudadanos que no pueden pagar su hipoteca… ¿Qué pensarán los mas de tres mi parados que hay en Rota de tu artículo?. ¿Qué pensará el último desahuciado por no poder pagar su hipoteca?. Cuando pase el verano te das un paseo con el estonio, entonces se lo creerá.

    Accede para responder

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.