A la altura de la película en que nos encontramos, nadie duda que aquí sólo vamos a oir aquello que quieran que escuchemos. Después de las patéticas justificaciones de que hizo gala nuestro gobierno sobre el rescate a la banca española, que todos sabemos que es un rescate del que tenemos que responder todos los españolitos, las contradiciones entre los miembros del ejecutivo y las andanadas que les venían en especial desde la prensa extranjera, sobre todo la especializada en economía, dejaron patente que no nos van a decir la verdad ni por receta médica, aunque se le añada el copago.

Para tratar de aplacar el insistente runrún provocado por los efectos contrarios a los esperados en los indicadores económicos, el ministro de Economía, el famoso De Guindos, nos explicó a los ignorantes y malpensados que esta reacción de las bolsas y de la prima de riesgo se debía a la incertidumbre por las elecciones griegas, no fuese a ser que ganasen los demonios de Syriza, y que Grecia la liase parda.

Nuestros amables gestores europeos se emplearon a fondo, pusieron a trabajar a todos los medios de comunicación a su servicio, que son casi todos, y se encargaron de decir que si no ganaba la derecha de Nueva Democracia, que más o menos se iba a acabar el mundo, pues Syriza, la coalición de izquierdas que aglutina a la población griega que se queja de la salvaje política de recortes, se iba a encargar de sacar a Grecia del euro. No hace falta decir que era mentira, pero también hay que reconocer que consiguieron su objetivo pues ganó quienes querían que ganasen.

Ya está. Lo hemos conseguido. Parece ser que todos estos burócratas al servicio de la banca estaban a gusto con el resultado. Pero... he aquí que, cuando se las prometían muy felices nuestros amados gobernantes, hoy la prima de los c..., perdón, de riesgo, se ha vuelto a disparar y hoy lunes llegaba a los 590 puntos, o sea que los cuartos prestados a partir de hoy se pagan al 7,2... %, aparte de otro batacazo que se ha dado la Bolsa, o sea que lo poco que queda cada vez vale menos. A esos buitres carroñeros que se alimentan con los sacrificios de los europeítos no les parece suficiente lo que les ofrecen los políticos para calmar su avaricia y siguen estrujándonos para sacarnos hasta la última gota. Eso sí, nadie va a decir que eso es lo que pasa, nos hablarán de la deuda española, que hasta que decidieron cargársela era de lo más civilizada, otra cosa era la privada; pero como aquí empeñamos el país para pagar lo que deben los bancos, la pobrecita deuda pública ha engordado como si fuera a hacer de luchador de sumo en una película manga. Ahora nos contarán la milonga de la baja productividad, de que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades, ¿se han puesto a pensar quiénes de ustedes habéis vivido así, si llevamos toda la puñetera vida haciendo equilibrios para llegar a fin de mes? ¿Se puede vivir con tanta mentira?

Pero hoy, a pesar de tanto y tanto desatino, no voy a enfadarme más. Es que hoy precisamente he recibido una noticia que me ha dado un verdadero subidón: En una época en que estamos carentes de referentes, una de las pocas personas de las que aún generan esperanza ha dado un paso adelante. Julio Anguita se ha ofrecido para trabajar por una nueva idea, un compromiso con la ciudadanía, un paso adelante para que libres de prejuicios que nos impiden ver la cosa claras nos lancemos a pelear por la única alternativa, la unión de las fuerzas progresistas.

Sólo quisiera hacer llegar a la gente que crea que esto tiene solución, y ya hemos visto que las soluciones hasta ahora ofrecidas por los gobiernos de turno sólo eran mentiras, que no se pierdan en temores infundados que el futuro está a nuestro alcance.

No puedo olvidar que, para darle más morbo Don Julio Anguita ha hablado de un Bloque Ciudadano, la verdad es que me suena y me halaga, siendo consciente de que la coincidencia con el Bloque Ciudadano de Rota, más que una premonición ha sido una casualidad.

Una nueva esperanza ha nacido.




Manuel García Mata