La Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Rota ya ha pasado su primera noche en el camino hacia la aldea almonteña. Kilómetros y largas horas andando se van sumando a los pies de estos rocieros que esperan con ansia llegar al Rocío para ver a su virgen.

Los  roteños llegaban ayer sobre las tres de la tarde a Bajo de Guía para iniciar el embarque y cruzar el río Guadalquivir junto a otras hermandades que iniciaron su peregrinación la misma jornada. Un embarque que según ha contado el hermano mayor, Juan Manuel Montes, a Rotaaldia.com, se desarrolló muy rápido y sin percances por lo que todo transcurrió de forma coordinada y segura para los cientos de romeros que a estas horas afrontan su segundo día de camino.  Casi un centenar de hermanos de la hermandad de Rota hicieron ayer el camino a pie acompañando a la carreta que porta el Simpecado, las temperaturas aguantaron bien, frescas, y eso ayudó a que la primera parte del camino se hiciera más fácil.

Sobre las seis y cuarto de la tarde la Hermandad de Nuestra Señora del Rocío entraba en Malandar y a las ocho aproximadamente, se llegaba a Marismillas donde los rocieros montaban el campamento para descansar, atender a los animales tras un largo camino e iniciar una larga noche de convivencia donde no han faltado oraciones, cante y baile. Según el hermano mayor, el ambiente de la hermadad roteña destaca por ser muy sano y de plena convivencia entre hermanos, por eso, los que hacen el camino disfrutan de estas jornadas de forma intensa.

La primera noche ha sido larga, hasta las seis de la mañana ha habido gente despierta en la zona de acampada y aunque solo han dormido un par de horas, esta mañana, al toque del alba del pitero de la hermandad, Juan Carlos Gómez "Suspirito", los rocieros han recogido el campamento y tras la celebración de la Misa de Romeros, sobre las nueve y cuarto de la mañana, han reanudado el camino.

Hoy las temperaturas son algo más altas que ayer y el tramo del camino es mucho más duro por la cantidad de arena que hay en la zona, por eso, esta jornada será algo más complicada para los roteños que aún así, mantienen todavía fuerzas. Tras la habitual parada a las doce del mediodía para rezar el Ángelus y una posterior para almorzar, la hermandad continuará su camino hasta el Corral de Félix (Las Lindes) donde esta noche pernoctarán  junto a las hermandades rocieras de Puerto Real, San Fernando, Chiclana, Cádiz y La Línea.

El hermano mayor de la hermandad, que este año hace por primera vez el camino con mayor responsabilidad, ha destacado el buen ambiente, la juventud y la convivencia que reina en el camino donde como en todo, las oraciones, el cante y el baile están encontrando un buen equilibrio que hace de la peregrinación una buena experiencia.

De momento, los roteños han pasado una buena noche en el camino y ya cuentan las horas para mañana jueves llegar a la casa de hermandad y preparar su presentación ante la Hermandad Matriz del Rocío, sin duda, uno de los momentos más emotivos.