Una veintena de abogados de oficio se ha concentrado este mediodía a las puertas del juzgado de Rota para reivindicar unas condiciones laborales dignas ante la situación de precariedad que aseguran que vienen viviendo desde hace tiempo, aunque es con las sucesivas huelgas de los funcionarios de justicia cuando están empeorando.

Con carteles reivindicativos alusivos a esta precariedad, a la necesidad de tener un turno de oficio bien remunerado, una profesión digna, una jubilación decente, por el derecho a la huelga y a la conciliación o por un acceso a la justicia sin barreras, han alzado la voz, no solo en la localidad, sino a nivel nacional porque la queja es unánime en este colectivo.

María del Carmen Benítez, una de las abogadas de oficio más veteranas del juzgado de Rota, desempeñando su función desde el año 1990, ha asegurado hoy a los medios de comunicación que en estos últimos años ha ido percibiendo una pérdida en la dignificación de la profesión que ya no pueden ni quieren callar por más tiempo.  En general, se sienten maltratados por el público y por los propios funcionarios de justicia, lamentando que nadie se dé cuenta de que son una especie de rehenes de las huelgas de sus compañeros.

El principal problema por el que han salido hoy a concentrarse durante unos minutos, es para poner de relieve la situación que viven a raíz de la larga huelga de los funcionarios de justicia que se mantiene sin avances, y de la que salen directamente perjudicados.  La situación es sencilla, con los paros de sus compañeros, ellos no pueden terminar sus servicios de defensa y por tanto, no pueden cobrar el trabajo realizado porque vienen encadenando aplazamientos de juicios por la falta de personal en huelga.

Aunque el colectivo entiende que sus reivindicaciones pueden ser legítimas y tienen pleno derecho para defenderlas, quieren hacer constar que ellos como abogados pagan el pato. No solo ellos, también los clientes a los que se les vulnera la tutela judicial y efectiva a la que tienen derecho.

Los abogados de oficio sienten que nadie les tiene en cuenta, por lo que piden a sus compañeros funcionarios de justicia, "que pongan fin a la huelga absurda, que no beneficia a nadie" y que negocien sus mejoras sin hacerlo a costa de perjudicarles directamente.

Esta es la primera concentración, ya que este colectivo no tiene derecho a huelga, pero no descartan alguna más para seguir alzando la voz, porque no es este el único problema que hoy han querido reivindicar. Y es que junto a María del Carmen Benítez estaba Juan Luis Márquez, como representante de los abogados más jóvenes, que en su caso,  ha denunciado el cambio de condiciones en la mutua de la abogacía, que les ha cambiado el sistema de pensiones que tenían establecido, y que les perjudica para las futuras pensiones de jubilación, que quedan en el aire y que es probable que sean  inferiores al Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

Es otra pata de esta petición de dignificación de la profesión de los abogados de oficio que siendo elementos fundamentales en el derecho a la justicia, no se sienten valorados.

Como indicaba Juan Luis Márquez, para los nuevos abogados de oficio que se incorporan, la situación es "insufrible" y tienen cada vez peores condiciones laborales, siendo los de la comunidad andaluza los abogados que menos cobran con respecto a otras comunidades autónomas del país.

Por ello, pedía en nombre de sus compañeros, que las administraciones, tanto la estatal como la autonómica,  tomen cartas en el asunto "porque nosotros miramos por el derecho de los demás, pero nadie mira por el de los abogados", ha manifestado, pidiendo igual que su compañera, el fin de una huelga que entiende que no es proporcional al efecto que causa en colectivos como el suyo.

Por si la situación no fuera suficiente, mucho peor lo tienen las abogadas de oficio que están embarazadas o acaban de ser madres ya que no tienen opción a bajas maternales, ni durante el embarazo ni tras haber dado a luz, por lo que prácticamente, cuenta Blanca Herrera, en estado de embarazo muy avanzado, "tenemos que incorporarnos recién paridas". A eso se suma que tienen que estar justificando su situación con ecografías presentadas ante el juzgado para poder pedir un aplazamiento o suspensión de gestión en un momento puntual.

La petición es que cambie el sistema y las abogadas de oficio embarazadas tengan la oportunidad de una baja maternal como la práctica mayoría de profesionales para poder conciliar mejor la vida laboral y familiar. Esta abogada cuenta que independientemente del estado de salud, si tienen que presentar  cualquier escrito en un plazo de cinco o diez días, da igual si estás dando a luz, ingresada u otra situación, lo que les hace muy cuesta arriba el desempeño de su función en un estado tan concreto.  Las opciones con las que cuentan son buscarse por su cuenta a alguien que le cubra o solicitar sustituciones para casos puntuales cuando en un estado de embarazo, lo lógico es que se dieran suspensiones automáticas, reivindica.

En definitiva, los abogados de oficio, no solo de Rota, sino de  otros muchos partidos judiciales del país, han salido hoy a defender sus derechos, los que aseguran, paradójicamente, nadie defiende.