Muchos vecinos de las calles Buenavista y Lope de Vega han venido mostrando su malestar y enfado por el retraso de las obras que se iniciaron a finales del mes de enero en este eje donde se planteó por parte del Ayuntamiento de Rota un proyecto de mejora en la red de saneamiento, además de nuevo asfaltado, alumbrado público más eficiente, mobiliario urbano e incluso la colocación de algunos árboles.

Y es que aunque la actuación fue acogida con muchas ganas por lo necesaria, e incluso presentada con ilusión -como el propio alcalde de Rota, Javier Ruiz, ha dicho hoy-, el retraso que acumula esta obra mantiene a los vecinos afectados muy enfadados.

Por eso, consciente del malestar y para explicar los detalles de la actuación, informar sobre el actual estado de las obras, en más de una ocasión paralizadas o con muy poco personal, el alcalde se ha reunido hoy con los vecinos. Lo ha hecho en la plaza de Merceditas en la que se han congregado unas 70 personas que han escuchado primero las explicaciones de Javier Ruiz y el director de obra que ha puntualizado algunos detalles, y luego han expuesto sus quejas, que han sido varias.

Principalmente, lo que trae de cabeza a los residentes de las calles Buenavista y Lope de Vega es llevar ocho meses con la calle levantada, con imposibilidad de salir de casa para algunas personas mayores con movilidad reducida, sin haber podido usar sus garajes, sobre todo con lo que ello significa en pleno verano, aparte de soportar el polvo, suciedad y todo lo que conlleva una obra habitual.

Si se hubieran cumplido los cuatro meses de ejecución iniciales, todos hubieran entendido que una obra de esta envergadura, con una inversión de 500.000 euros, conllevaría molestias normales, lo que ocurre es que el tiempo de ejecución no solo se ha duplicado, sino que todavía no hay fecha concreta de terminación.

Una buena noticia que al menos sí ha trasladado el alcalde en esta reunión, es que de cara a la semana que viene, si la empresa que se encarga del servicio de aguas en Rota, Aqualia, constata que la presión y caudal del agua circula correctamente por la nueva tubería que se ha sustituido y las nuevas acometidas no presentan deficiencias, la empresa podrá empezar a asfaltar por lo que es probable, jugándosela a dar una fecha, que a finales de la próxima semana, el 9 de septiembre, el tramo de la calle Buenavista y Lope de Vega, desde la calle Inmaculada Concepción hasta Calderón de la Barca, quede asfaltado y en dos semanas prácticamente finalizado. Faltaría solo la colocación de mobiliario urbano y algunos detalles.

Los vecinos esperan que esa previsión se cumpla, incluso el alcalde reconocía que cruza los dedos para que así sea, asegurando que tras los vecinos, el siguiente enfadado con la situación es el propio Ayuntamiento. Y es que en su explicación a los afectados, Javier Ruiz ha explicado que la empresa no habría cumplido con las tres fases planteadas para este proyecto, de modo que se fuera abriendo progresivamente tramos en obras una vez que se iban terminando otros para no tener la calle entera empantanada como ha ocurrido.

Además, ha indicado que es cierto que la empresa ha tenido a poco personal, lo que ha molestado aún más a los vecinos que veían como día tras día o no se trabajaba o solo lo hacían a lo sumo, cuatro operarios para toda una calle levantada. Javier Ruiz ha querido explicar que han tenido alguna dificultad con la empresa adjudicataria pero que romper el contrato con ella hubiera ralentizado aún más el proceso ya que burocráticamente, resolver un contrato con la administración y volver a sacar a concurso una obra es cuestión de meses. Por eso, ante las dificultades encontradas, el Ayuntamiento apostó por mantener a la misma empresa y pedirle que reforzara el personal y aligerara los trabajos.

Por otro lado, explicó otras de las cuestiones que han obstaculizado el avance de las  obras como son los problemas que ha habido con las actuaciones realizadas por las subcontratas que se encargan de la red de suministro, ya que cuando la empresa municipal ha hecho las pruebas, la red no soportaba los test de presión y pruebas  que debe superar para garantizar su  correcto desarrollo. Así las cosas “teníamos que estar totalmente seguro de que las instalaciones aguanten antes de seguir con la obra”. Este lunes, 5 de septiembre, se volverán a realizar las pruebas.

El alcalde ha reconocido que no es lo mismo trabajar en una calle de nuevos suelos que en esta que ya tiene viviendas asentadas, acometidas y salidas planteadas desde hace años a las que hay que adaptarse y que eso genera que el proceso sea más complicado pero entiende que los vecinos estén enfadados. Aún así, les ha dado un hilo de esperanza confiando en que a finales de la próxima semana quede asfaltado el tramo desde Buenavista a Calderón de la Barca, y que en 15 días, el tramo quede prácticamente con la solería colocada y demás detalles. 

El otro tramo, el que va desde Calderón de la Barca hasta la calle San Antonio, donde el saneamiento también se va a mejorar sustituyendo la tubería y algunas acometidas,  irá más rápido, ha dicho, porque la obra es de menor envergadura que en el tramo inicial por donde se ha empezado este proyecto. La previsión es que en octubre ya haya un avance de tránsito normal, y que en noviembre esté terminado y con ello, una calle Buenavista y Lope de Vega completa  no solo con una red de saneamiento nueva, sino con un asfaltado en plataforma única en el primer tramo (desde Inmaculada Concepción a Calderón de la Barca), y nueva iluminación led, algunos bancos, algunos árboles, menos barreras arquitectónicas y mejor accesibilidad en todo el trazado. Por otro lado, y ante las quejas de los vecinos, el alcalde ha explicado que también se han contemplado una serie de badenes que obligarán a reducir la velocidad de coches cuando se transite por estas calles, rebajes de bordillos donde no los hay actualmente,  además de anotar ante la queja vecinal, que habría que calibrar la intensidad de las nuevas farolas que para los residentes es demasiado alta.

Javier Ruiz, como ya hizo con los vecinos de la barriada de El Molino por las quejas antes el retraso de las obras en el paseo marítimo del Rompidillo, ha querido dar también explicaciones personalmente a estos afectados, tomando nota de aquellas sugerencias y deficiencias que estos ciudadanos ven a priori que les puede afectar y se pueden corregir. Entre ellas, han pedido más papeleras, que los vados de los garajes que no se han podido usar en estos 8 meses no se cobren (algo que tendrán los propios interesados que solicitar por escrito al Ayuntamiento de Rota para que se haga la devolución correspondiente), que se compruebe la accesibilidad para la entrada de algún garaje con la reordenación de plazas de aparcamiento que ha habido, que se miren las grietas que han aparecido en algunas viviendas (cosa que también los afectados deben notificar para que el perito compruebe el origen de las mismas), que se coloquen espejos en los cruces para mejorar la visibilidad de los conductores o que se coloquen bolardos para dar mayor seguridad a algunos peatones en puntos concretos donde el coche podría invadir la zona de acera que ahora va al mismo nivel que la calzada.

Precisamente sobre el acerado ha habido quejas por el diseño, ya que los vecinos entienden que no tiene sentido haber mantenido la estrechez de la acera en el margen donde están prácticamente todas las viviendas en la calle Buenavista, y haber puesto más ancha la que linda con el colegio San José de Calasanz. A este respecto, Javier Ruiz ha explicado que esa proporción era la única forma de hacer que al menos una de las dos aceras cumpla con la ley de accesibilidad, destacando que con el nuevo diseño de plataforma única para toda la calle, muchas de las barreras arquitectónicas desaparecerán.

En definitiva, la reunión con los vecinos ha servido para explicar algunos detalles de la obra que los vecinos venían reclamando y para que el alcalde en persona, pidiera disculpas por los retrasos asegurando que cuando la obra esté terminada, pese a todas las molestias e inconvenientes, los vecinos se alegrarán por tener un mejor saneamiento, una calle mejor iluminada y con mejor accesibilidad.

En cualquier caso, ha pedido a los afectados que aquellas cuestiones puntuales que crean conveniente reclamar, que lo hagan saber por escrito para que se tome nota y se solventen lo antes posible.