La ausencia de candidaturas que quieran coger las riendas de la Asociación de Empresarios, Comerciantes e Industriales de Rota (Aeciro),  ha provocado que en la asamblea extraordinaria  celebrada anoche se aprobara el inicio del procedimiento de disolución de esta entidad.

En 2022, esta asociación, que ha defendido siempre los derechos y necesidades del tejido empresarial, industrial y comercial de Rota, ha llevado a cabo campañas de dinamización del comercio, ha asesorado a sus asociados en cuestiones de diversa índole y en pandemia ha demostrado ser una entidad muy útil, aclarando dudas sobre las normas y decretos que se iban aprobando por los diferentes gobiernos, cumpliría en 2022  sus 30 años de trayectoria. Pero visto lo visto, no llegará a la tercera década.

Y es que anoche, en la asamblea extraordinaria convocada, no solo no hubo una nueva candidatura para sustituir a la actual directiva  que actúa en funciones desde hace un par de meses, es que ni siquiera hubo participación. De 125 asociados, además de los miembros de la junta directiva saliente encabezada por Juan Alberto Izquierdo, solo asistieron cuatro socios más, por lo que la asamblea no tuvo más remedio que iniciar el procedimiento de disolución de Aeciro tal y como queda recogido en sus estatutos.

La falta de participación queda demostrada por segunda vez consecutiva, lo que produce a la actual junta saliente un sentimiento doble. Como ha indicado el propio presidente en funciones, Juan Alberto Izquierdo, en un comunicado breve a los asociados, esta situación le produce cierta decepción al ver que tras los años trabajados, finalmente, la asociación de comerciantes, empresarios e industriales de Rota vaya a desaparecer. Como presidente que ha sido de la entidad durante los últimos doce años, Juan Alberto Izquierdo asegura marcharse con la satisfacción de haber participado en mejorar las condiciones que beneficiaban al tejido empresarial local, pero lamenta que ni siquiera haya podido despedirse personalmente de los asociados en una cita tan importante para Aeciro como era la asamblea extraordinaria de anoche, que ha supuesto el principio del fin ante el desinterés generalizado que han mostrado los asociados.

Con la aprobación del inicio del procedimiento de disolución ya en la mesa, ahora toca cumplir otros plazos marcados en los estatutos de Aeciro para la liquidación patrimonial y se dará por cerrado este capítulo.

Esta misma semana, el Ayuntamiento de Rota firmaba la renovación del acuerdo de colaboración que se mantiene con esta asociación a favor de los comercios, empresarios e industriales de la localidad; es una entidad saneada en sus cuentas y con una buena imagen a nivel provincial por el trabajo desarrollado, sin embargo, tras la decisión de la actual junta directiva de dar un paso al lado tras doce años, nadie se ha animado a tomar el mando, por lo que pese al buen momento que pasa Aeciro, esta desaparecerá.