La dirección del colegio Eduardo Lobillo aclara la polémica sobre el punto Covid en el centro
La dirección del colegio Maestro Eduardo Lobillo ha querido aclarar a través de este medio la polémica que se ha levantado con respecto a la instalación de un punto para practicar pruebas PCR en este centro educativo y que ha llevado a un cruce de declaraciones políticas entre el Ayuntamiento de Rota y la Junta de Andalucía. Las dos instituciones han dado una versión diferente de los hechos, el gobierno andaluz negando que se fueran a hacer PCR en este colegio, y el gobierno local asegurando que había padres con cita para el lunes 25 de enero y por tanto, con pruebas de que era algo real.
En este caso, al margen de la pelea política, la cuestión ha sido más sencilla de lo que parece y como en muchas ocasiones, se ha debido, según la dirección del colegio Eduardo Lobillo, a un acto de buena voluntad sin calibrar las consecuencias que podría acarrear, unido a una falta de coordinación entre administraciones.
La cuestión ha sido que, a raíz de una clase confinada en el Eduardo Lobillo, obligada a hacerse la prueba PCR, la enfermera de referencia en casos Covid y la dirección del centro intentaron buscar una solución para evitar que los alumnos pequeños y sus familias tuvieran que desplazarse hasta Jerez para someterse al test para la detección del coronavirus. Entre las alternativas, se barajó que se pudiera situar en el mismo colegio Eduardo Lobillo, en una zona aislada y con todas las medidas de seguridad, un punto Covid que permitiera realizar las pruebas sin necesidad de desplazamientos fuera de Rota. En principio, aunque se barajó hacerlo como punto autocovid, es decir, que los coches entraran por una puerta del centro para no tener que bajarse siquiera, se vio que era inviable al no contar con otra puerta de salida para los vehículos, así que buscando otras opciones, se optó por el aula que usa el AMPA como sede, que ahora está inutilizada, y que además está apartada de la zona de las clases del alumnado. Desde la dirección del centro, en un acto de buena voluntad, se accedió ya que además, ese espacio aislado de las aulas, tenía puerta de salida y otra de entrada para permitir que los niños y sus familias accedieran tomando precauciones, sin aglomeraciones y con cita previa cada 15 minutos.
En este planteamiento, y dado que también varias clases de otro centro educativo estaban en la misma tesitura, se pidió permiso a la dirección del Lobillo para evitarles el desplazamiento a Jerez y que las pruebas PCR se les practicara en este mismo punto aunque fueran alumnos ajenos a este colegio. Lo que ocurre es que al empezar a dar las citas y la información a los padres, algunos de ellos empezaron a mostrar malestar al entender que no era el centro educativo el mejor sitio para este punto covid y de ahí, cuando las quejas de los padres llegaron al alcalde de Rota, este decidiera ofrecer a la Junta otras instalaciones municipales. De ahí, la nota de prensa emitida anoche a la que esta mañana la Junta de Andalucía contestaba desmintiendo que fueran a instalar un punto covid en el Lobillo. Algo que ha indignado al alcalde ya que, aunque fuera por un motivo de buena voluntad, la realidad es que se iba a hacer en el colegio.
Hubiera sido más fácil, con algo de coordinación entre las dos administraciones, que ambas estuvieran al tanto de la decisión tomada y haber evitado un enfrentamiento político (uno asegurando una versión y el otro desmintiéndola).
En este caso, se entiende desde la dirección del Lobillo, que con haber especificado que lo que se iba a montar en el colegio no era un punto permanente para pruebas PCR sino una situación puntual, hubiera bastado, pero el desmentido de la Junta de Andalucía ante el ofrecimiento del Ayuntamiento de Rota indignaba a padres, al propio alcalde y a la dirección del Lobillo.
La directora del colegio ya ha enviado un comunicado a los padres de alumnos (a través de iPasen) asumiendo su parte de responsabilidad en una situación en la que ha primado cierta descoordinación, pero en la que ha querido dejar claro que cuando aceptó que en el Lobillo se realizaran las pruebas PCR a los alumnos del colegio que están confinados y posteriormente, que también fueran algunas clases de otro centro, se hizo con buena voluntad, intentando evitar desplazamientos a Jerez y agilizar en lo posible la realización de los test. Cierto es que no se calibró del todo las posibles consecuencias y el malestar que ha suscitado entre los padres de alumnos.
En cualquier caso, hay que dejar claro que finalmente, no es el Eduardo Lobillo el sitio en el que se harán estas PCR y que el Ayuntamiento mantiene abierta su predisposición a ayudar poniendo instalaciones municipales al servicio de la Junta de Andalucía para los puntos autocovid. Aunque se le informará a todas las familias afectadas, las pruebas se harán en la caseta "Nueva Jarilla", en el recinto ferial.
La dirección del colegio ha querido pedir disculpas a las familias por el trastorno causado y las molestias así como por haber suscitado esta polémica que en realidad solo tenía como finalidad ayudar a facilitar las cosas en una situación tan compleja como esta crisis sanitaria.



































Preocupado | Lunes, 25 de Enero de 2021 a las 09:34:31 horas
Por cierto, no ve voy al bar a desayunar, tal vez es tu mala educación comentar sin saber, pero yo lo dejo y me voy a trabajar, y lo único que hace mi hijo es clases particulares para ayudarle en sus estudios, a diferencia de muchos, yo he quitado a mi hijo de otras actividades pero esas clases son necesarias, si me fuera al bar con todos esos padres quizás ya me habría enterado de la edad de esos niños, pero yo al menos intento no salir de casa ni reunirme con otros grupos, solo salgo para lo esencial. Un saludo para aquellos que hablan sin saber
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