La entrada en vigor este domingo del nuevo estado de alarma con toque de queda incluido, vuelve a afectar de manera más directa, entre otros sectores, a los hosteleros que, sin clientes por las calles desde las once de la noche -hora generalizada a partir de la que se prohíbe la estancia en la vía pública sin motivo justificado-, se plantean cómo sostener sus negocios abiertos. Por eso, desde que ayer se anunciara por parte del Gobierno central estas nuevas medidas, muchos hosteleros locales ya han empezado a trasladar a Aeciro, la asociación que defiende a empresarios, comerciantes, industriales y autónomos de Rota, su preocupación por la nueva situación que se presenta.

Aunque es cierto que la actividad hostelera podría seguir activa, no tiene mucho sentido si el negocio en cuestión no cuenta con reparto a domicilio ya que los clientes no podrán estar en la calle desde las 23.00 horas  hasta las 6 de la mañana. Pero como el Gobierno central ha dado flexibilidad a los presidentes de las diferentes comunidades autónomas, en Rota, como en otras poblaciones, se espera que la Junta de Andalucía retase una hora el toque de queda y lo establezca de 12 de la noche a 7 de la mañana de modo que la hostelería no se vea tan perjudicada.  Dado que el presidente andaluz, Juanma Moreno, aún no se ha pronunciado al respecto, los hosteleros han empezado a mover esta petición de modo que una hora más con gente por las calles, pueda permitir desarrollar su actividad.

En esta línea, intentando salvar al sector hostelero, que el presidente de Aeciro, Juan Alberto Izquierdo, coincide en que está siendo uno de los más castigados, se está trabajando en plantear algunas campañas que animen al consumo en bares locales ajustándose a los horarios que marca este nuevo estado de alarma y por supuesto, con las medidas necesarias de seguridad. Ya existe por redes sociales una campaña que invita a los ciudadanos a  adelantar sus cenas a las 20.00 horas de modo que el servicio de cenas en bares y restaurantes no se pierda del todo. Es una iniciativa de Hostelería de España, la federación nacional, pero que Aeciro no descarta impulsar también en Rota ya que eso permitiría cierto alivio en una situación que se está volviendo muy complicada para los hosteleros, un sector del que dependen indirectamente otros proveedores y empresas que, con el cierre de bares también se verían afectados. 

A la preocupación normal por la situación, a la necesidad de que la Junta de Andalucía se pronuncie sobre el retraso en una hora para el toque de queda y al trabajo que se está llevando a cabo desde Aeciro para plantear iniciativas que echen un cable a este sector, se une tener que solventar dudas sobre situaciones que muchos hosteleros no tienen del todo claras como que un bar pueda permanecer abierto hasta la 1 de la madrugada por ejemplo, limpiando, preparando comidas para el día siguiente, o con un servicio de reparto a domicilio. Como cada vez que se aprueban nuevas medidas, surgen dudas que desde esta asociación local también intentan responder y que en la jornada de hoy lunes se están recibiendo.

Juan Alberto Izquierdo es consciente de que se avecina un invierno duro para la economía local, y no solo para los hosteleros aunque quizás ellos, al depender directamente de la presencia de gente en la calle, se ven como uno de los más perjudicados a los que les ha afectado no solo el cierre que se estableció para la una de la madrugada, las limitaciones de aforo y ahora, el toque de queda.

Desde Aeciro, en contacto con sus asociados y con el Ayuntamiento de Rota, aseguran que se están perfilando algunas propuestas y esperan que la Junta de Andalucía se pronuncie concretando el toque de queda de 12 de la noche a 7 de la mañana. De momento, preocupación generalizada en el sector donde algunos bares se plantean el cierre de su actividad y con ello, mayor pérdida de puestos de trabajo.