Los relojes de los españoles tendrán que atrasarse una hora esta madrugada, del 24 al 25 de octubre,  ya que a las 3.00 horas volverán a ser las 2.00. De esta forma, se cumple con el cambio de horario adaptando el de verano al de invierno, habitual a finales del mes de octubre, cumpliendo así  con la Directiva Europea que rige el denominado "Cambio de hora" y que afecta a todos los Estados miembro de la Unión Europea. Los españoles tendrán por tanto el domingo una hora más para disfrutar.

Y es que pese al debate suscitado para eliminar el cambio de hora, de momento, las posturas  de los dos bandos no se encuentran y por tanto, hay que seguir cambiando el reloj en aquellos dispositivos que no lo hagan de forma automática.

Este cambio de hora se produce todos los años el último domingo de octubre en cumplimiento de una directiva europea que según cálculos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE), supone un ahorro del 3% en iluminación entre los meses de marzo a octubre, lo que equivale a 300 millones de euros.

La práctica de atrasar el reloj una hora en invierno y adelantarlo en verano se generalizó de forma desigual a partir de 1974, al producirse la primera crisis del petróleo en cuya respuesta algunos países decidieron adelantar sus relojes para poder aprovechar mejor la luz del sol y, por ende, consumir menos electricidad en iluminación. Se aplica como directiva desde 1981 y ha sido renovada sucesivamente cada cuatro años, según recuerda el Ministerio de Industria, Energía y Turismo.