HA SOBRADO MEDIO AÑO


  
  
Si en todas las actuaciones pusieran el mismo empeño, el personal no se quejaría tanto. “Rota se prepara para la Semana Santa”, leo en un titular periodístico. Todo un despliegue de medios humanos, manos a la obra, una semana antes del Domingo de Ramos, para acondicionar el recorrido procesional. Se retiran macetones, se recortan esas ramas que incordian, se planifican los cortes de calles, se instalan palcos,…

“Los vecinos de la playa Galeones demandan limpieza en la zona”, leo en otro titular de este mismo periódico. Según los vecinos, la suciedad se acumula en la zona del paseo marítimo desde hace semanas, y la basura depositada en la lámina de arena desde el pasado fin de semana, allí sigue. No sé si seguirá o la habrán retirado ya, pero la queja era real. No era inventada, no era ficticia. No había sido llevada a cabo para criticar la actuación de nuestros gobernantes.

Otro titular de parecido contenido me llama la atención: “La EUC denuncia el estado de la playa de Costa Ballena”. También se quejan los portavoces de la Entidad Urbanística de Conservación de Costa Ballena de la falta de limpieza en la playa en los comienzos de la temporada media.
Algo de los que siempre hemos presumido los roteños, de la limpieza de nuestras calles, plazas, avenidas y playas; son denuncias cada vez más generalizadas sobre nuestra pulcritud. Y no se tratan de denuncias de los partidos políticos de la oposición. Son los propios vecinos, con pruebas fehacientes, los que la llevan a cabo.

Desde mi opinión, creo que a este equipo de gobierno y a esta legislatura les ha sobrado medio año. Iba a decir desde mi modesta opinión, pero he omitido el adjetivo porque la modestia no deja de ser, en el fondo, la más decente de las mentiras, como expresó alguien.
Desde que la Alcaldía cambió de mano y de partido, hemos entrado en lo que se puede denominar “legislatura basura”.
Basta echar un vistazo a los puntos del orden del día de los diferentes Plenos municipales para darse cuenta de ellos. Ningún asunto de interés. Se ha pasado la legislatura sin que los roteños veamos aprobados unos presupuestos. Han pasado seis meses desde aquella aparición que nos hizo saltar las lágrimas a más de uno, sin que se haya llevado a efecto el convenio colectivo de los funcionarios del Ayuntamiento. No ha interesado entrar en detalles y debates. El equipo de gobierno ha agotado sus ideas. O ha perdido el rumbo, que viene a ser lo mismo. Lo que no han agotado ha sido el programa electoral con el que se presentaron a las elecciones. O no lo han cumplido, que también viene a ser lo mismo. Por eso no interesa debatir. El argumento de salubridad económica del que se presumía ha dado paso a una situación preocupante.  
La ignorancia es la mejor aliada en estos casos. “Más vale permanecer callado y parecer idiota que hablar y despejar todas las dudas”, decía un ilustre personaje. La máxima de que “el pueblo es sabio” la sostenemos todos. Afirmar lo contrario resulta políticamente incorrecto. Pero también se puede afirmar, sin miedo a equivocarnos, que el pueblo puede ser, y de hecho lo es,  fácilmente manipulable.

La piña que mostraba el equipo de gobierno era sólo apariencia. Saltan las alarmas y los disconformes. La Política, así escrita con mayúsculas, ha dado paso al “sálvese quién pueda”. El vecino ha dejado de ser el objetivo del político. Ahora se trata de volver a ganar las elecciones. Algo no ha salido según los planes previstos. Hay que volver a convencer al personal que la razón de encabezar una candidatura es el ciudadano. En el fondo, lo que se busca desesperadamente es mantener el poder. ¿Quién es el ingenuo/a que se cree que la Política tiene un alto contenido de servicio según que elementos se mueven dentro de ella?
¿Se gobierna pensando en la ciudadanía o para mantener el poder? ¿A qué viene si no ese gastar el dinero público en propaganda partidista? Por eso se gasta también el dinero público en mantener contento a ese personal que va a garantizar un número determinado de votos.

Ha sobrado medio año. En el poco tiempo que queda de legislatura, tras la Semana Santa nos veremos inmersos en plena campaña electoral, coincidiendo, además, con nuestra Feria de Primavera. Serán los últimos cartuchos. Para los que tienen mucho que perder (el seguir gobernando) serán días de nervios. Para los que aspiran a ganar (a gobernar) serán días de expectación. El pueblo dirá, que para eso es sabio.
Salud.


                                                                                                   ANTONIO FRANCO GARCIA