Funcionarios de las Brigadas locales de Policía Judicial de las Comisarías del Cuerpo Nacional de Policía de Sanlúcar de Barrameda y Rota, han culminado la denominada "Operación Acuña", logrando detener a una pareja residente en Rota imputada como presuntos autores de varios delitos de explotación sexual, detención ilegal, amenazas y tráfico de drogas.   

Los funcionarios policiales actuantes tenían conocimiento de que esta pareja, desde al menos primeros del presente año, se estaba dedicando a la explotación sexual de varias mujeres de nacionalidad iberoamericana, empleando para ello el domicilio particular donde vivían, ubicado en el municipio roteño. Una vivienda en la que residían al menos tres mujeres junto a la pareja detenida, la cual ejercía sobre ellas un férreo control no permitiendo su libertad de movimientos, obligándolas bajo amenazas a realizar prácticas sexuales no consentidas y a dispensar o consumir junto con los "clientes" sustancias estupefacientes, que previamente esta pareja les proporcionaban si antes eran pactadas.

Los agentes nacionales actuantes se encontraron con la dificultad de obtener cualquier tipo de denuncia por parte de alguna de las tres mujeres que ejercían la prostitución en esa vivienda por la especial situación de desamparo que éstas presentaban, la mayoría de ellas con hijos en sus países de origen. Como ya ocurre en otros casos similares, puesto que el único objetivo de las tres iberoamericanas era conseguir y mandar dinero a su país, se convierten en un colectivo especialmente vulnerable del que se aprovechan personas que teniendo en cuenta su circunstancia, no dudan en explotarlas en su único beneficio teniéndolas en un régimen de semiesclavitud, eligiendo a los clientes y anunciando mediante tarjetas publicitarias el domicilio como "casa de relax".

Esta operación no sólo ha significado la detención de esta pareja, sino lo más importante, la "liberación" de tres mujeres que estaban siendo víctimas de un presunto delito de explotación sexual y trata de mujeres. A todas ellas, se les ha informado escrupulosamente de los derechos que les asisten para que en el caso de que lo soliciten, puedan acogerse a las medidas de protección que diferentes órganos oficiales al respecto puedan proporcionarles.     

En el registro domiciliario se ocuparon varios teléfonos móviles, tarjetas de la dirección y teléfonos de contacto para "casa de relax", 49 gramos de hachís, balanza de precisión, joyas y 180 euros.

Los detenidos resultaron ser Antonio A.G., natural y vecino de Rota de 46 años, al que le constan 9 detenciones anteriores, entre otras, por robo con fuerza, malos tratos en el ámbito familiar y tráfico de estupefacientes. Junto a él, ha sido detenida su esposa, R.B., natural de Rumania, de 46 años, que carece de antecedentes desfavorables. Ambos fueron puestos a disposición judicial decretándose su ingreso en prisión.