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Sábado, 15 de Diciembre de 2018

Carlos Roque Sánchez

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OXÍMORON

 

 

 

 

Palabra en busca de significado. Es uno de esos términos que, aun conociéndolo, es más que probable que si nos lo preguntan a bote pronto, nos sepamos decir lo que significa. Pero no hay que preocuparse por ello, para eso están los diccionarios. He tirado del de la RAE (vigésima segunda edición) y me he encontrado con dos sorpresas. Una, que la palabra no es aguda (oximorón) sino esdrújula, y otra, que su plural no es oximorones sino los oxímoron (es invariable en plural, ya que no existen sustantivos sobresdrújulos) o bien oxímoros que también es válido. Son dos de las no pocas sorpresas que da la lengua.

 

En realidad, consiste en una estructura sintáctica formada por dos palabras o expresiones de significado opuesto, cuya unión da lugar a un tercer concepto cuyo significado dependerá de la interpretación del lector. Como ven no es que sea fácil la cosa. Se la aclaro con unos ejemplos: ‘silencio atronador’, ‘vista ciega’, ‘fuerte debilidad’, ‘mala salud de hierro’, ‘instante eterno’. Ahora seguro que sí. Es evidente que la contradicción explícita en esta última, fuerza al lector a buscarle un sentido metafórico, como el de considerar que el instante es tal que, por la intensidad de lo vivido durante el mismo, hace perder el sentido del tiempo. ‘Instante eterno’. Como ven el oxímoron es una figura literaria, más fácil de mostrar que de definir. De ahí que se recurra a ejemplificaciones. Por cierto, antes de que se me olvide, para su denominación se utiliza también el latinismo ‘contradictio in terminis’ y, en latín, conocemos varios: ‘formosa deformitas’, ‘concordia discors’, ‘festina lente’. Bellísimos.

 

Algo más que una moda. No es raro que escuchemos o leamos algún que otro oxímoron al día, y es que lo utilizan hasta los políticos, no les digo más. Incluso, tengo para mí, que esto es algo más que una moda lingüística. Como cuando le dio a la gente por decir lo de “bestial” o “absurdo”, sin por eso referirse ni a la zoología ni a Ionesco, ya saben por dónde voy. Creo que la popularidad del oxímoron deriva de lo que, de contradictorios tienen los tiempos que vivimos. Unos tiempos alejados de esas ideologías que pretendían reducir las contradicciones e imponer una visión unívoca de las cosas.

 

¿Quiere unos ejemplos?, pues ahí van: ‘Realidad virtual’, ‘La nada concreta’ o ‘Inteligencia artificial’, sin olvidarnos de ‘Cerebro electrónico’, un terrible oxímoron si por cerebro se entiende esa masa viscosa que tenemos en la caja craneal. Por otro lado, comprenderán de mi ‘desesperada esperanza’ al leer ‘Alianza de Civilizaciones’. O lo de ‘bombas inteligentes’ que puede no parecerlo, pero sí es un oxímoron, y es que las bombas caen donde las arrojan, son estúpidas. Es un ‘insensato sentido’. Claro que hablando de armas e insensatos, me vienen a la mente los políticos y el de ‘convergencia paralela’, que si los unimos, armas y políticos, nos da el de ‘fuego amigo’. Lo que es genial, si pensamos que los disparos lo hacemos para dañar al enemigo. De ahí lo de “al suelo que disparan los nuestros”, digo yo.

 

Están por todos lados. El recurso a esta figura retórica es muy frecuente, y se lo ejemplifico. En el terreno de la poesía, sea mística o amorosa: ‘Oh, mundo inmundo’, ‘Ayer naciste y morirás mañana’ (Luis de Góngora y Argote); ‘Que tiernamente hieres’, ‘La música callada’ (San Juan de la Cruz); ‘Es hielo abrasador, es fuego helado, es herida que duele y no se siente...’, ‘Lo fugitivo permanece y dura’ (Francisco de Quevedo); ‘Ir y quedarse, y con quedar partirse...’ (Lope de Vega).

 

También en el mundo científico abundan: ‘Al infinito y más allá’, ‘Crecimiento negativo’, ‘Creencia científica’, ‘Cuadratura del círculo’, ‘Detener el tiempo’, ‘Estimación precisa’, ‘Eterno presente’, ‘Giro vital de 360º’, ‘Hielo fundido’, ‘Soñar despierto’, ‘Seguridad informática’, ‘Sol negro’, ‘Tiempo material’, ‘A ciencia cierta’, ‘Espacio de tiempo’, ‘Teoría del caos’, ‘Organización entrópica’, ‘Windows funciona’. Son como una inversión de las leyes de la naturaleza.

 

Y en el pseudocientífico, claro: ‘Vida después de la muerte’, ‘Misterios sin resolver’, ‘Medicamento homeopático’, ‘Horóscopo acertado’, ‘Creacionismo científico’, ‘Año cero’, ’Religión verdadera’, ‘Evolucionista cristiano’, ‘Astrología científica’, ‘Fe racional’, ‘Gracias a Dios soy ateo’. Entre lo imposible y el milagro. Por supuesto que en el político tampoco faltan: ‘Aldea global’, ‘Agricultura ecológica’, ‘Desarrollo sostenible’, ‘Déficit cero’, ‘Prohibido fijar carteles’, ‘Paz armada’, ‘Guerra preventiva’, ‘Golpe institucional’, ‘Ejercito pacificador’, ‘Inteligencia militar’, ‘Guerra santa’. Y poco más por hoy, que menos siempre es más. Al decir del arquitecto.

 

CONTACTO: [email protected]

FUENTE: Enroque de ciencia

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  • Hermano Lobo.

    Hermano Lobo. | Miércoles, 19 de Diciembre de 2018 a las 20:43:34 horas

    En la línea de siempre, un artículo inteligente, didáctico y divertido.

    Accede para responder

  • Harpo

    Harpo | Martes, 18 de Diciembre de 2018 a las 19:56:11 horas

    Ya lo decia Groucho, "La inteligencia militar, es una contradicción en sus terminos", osease un oximoron de libro.

    Accede para responder

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