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Sábado, 27 de Octubre de 2018

Balsa Cirrito

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SED BUENOS

 

 

 

    

Por simples razones de higiene mental, no tengo Twitter, pero un amigo me refiere el siguiente mensaje que leyó hace poco en tal plataforma: "a ver si encontráis una cosa que os parezca buena y ponéis algo bonito en Twitter por una vez, que sois muy cansinos". En realidad, casi resume el mundo, al menos nuestro mundo.
    

 

Con frecuencia se tiene la sensación de que somos una especie de horda de ciudadanos cabreados (de hecho, observen como la propia palabra "ciudadanos" ya incluye ciertas dosis de cabreo; si hubiera escrito "personas cabreadas" el cabreo parecería menor) ciudadanos digo, descontentos con todo lo que se mueve. No creo estar exagerando si señalo que nos hallamos en un periodo dorado de la humanidad. El bienestar económico es el más alto de la historia, y, lo más importante, no solo ha mejorado la situación en Europa o Norteamérica, sino, en general, en todo el mundo. Cierto que queda mucho por hacer y que hay muchos lugares de insoportable pobreza, pero a veces hay que mirar lo que se ha hecho, no lo que falta. La democracia se halla extendida como nunca. La ciencia avanza de tal suerte que comienza a hablarse de vencer a la propia muerte. Las personas recorren y conocen el mundo hasta el punto que el turismo, en muchos lugares, comienza a ser un problema, más que un negocio.
    

 

Sin embargo, el grado de irritación generalizado es inmenso. Redes, foros y programas de TV habitados por individuos en estado de mala leche perpetuo. Me sorprenden sobre todo dos cosas. La primera, la falta de aguante. Nadie pasa ni una, nadie admite críticas. Especialmente, los colectivos, ya sean geográficos, profesionales, ideológicos o de lo que se les ocurra. Cualquier cosa que se diga contra, es un decir, los asturianos, los budistas o los enfermeros provoca un principio del cataclismo: al parecer es imposible que tanto los asturianos como los enfermeros o los budistas hagan nada reprobable como colectivo; supongo que por eso todo el mundo despotrica tan a gusto contra los políticos: son los únicos que no se quejan. El otro gran damnificado es el sentido del humor. Puedo entender perfectamente que haya gente que descarta cualquier clase de humor que resulte realmente ofensivo; lo que considero más complicado de admitir es que se busquen ofensas en cualquier frase que nos haga reír. No creo que haga falta poner ejemplos. Y esto se ve especialmente en lo que hace referencia a cada uno, si no, observen, qué pocas personas vemos capaces de reírse de sí mismos, y, desde luego, qué pocos personajes públicos.
    

 

Y en el periodismo esto ya llega al límite. Fíjense como, con escasas excepciones, los periodistas de referencia son los más hijoputas. Los más admirados son los más cabrones. Y todo aquel que no vaya a saco resulta que es un vendido o un paniaguado. Hay que tener valor no para criticar, sino para soltar alabanzas. De lo que sea.
    

 

Es muy probable que usted que está leyendo esto se halle de acuerdo conmigo; lo digo porque cada vez que suelto este rollo todo el mundo me da la razón. Pero me temo que es una razón teórica, abstracta. Cuando se transforma en asuntos concretos, se pierde, digo mejor, perdemos ese deseo de ser buenos y de no irritarnos con todo y volvemos a ponernos en posición de cuidaditoquealaprimeratecomodeunbocao.
    

 

Aunque donde creo que la tendencia hace más daño es en el mundo de la política. Hasta hace no demasiado tiempo, los estudios indicaban que el candidato que enviaba mayor número de señales positivas a los electores era el que ganaba unas votaciones. No hace falta decir que esto ha cambiado. En la actualidad, el candidato más bocazas, más borde, más beligerante, más extremista y más chulo es el que se lleva el gato al agua. Cuesta trabajo creer que un individuo como Trump (en cuyas ideas ahora no entro ni salgo) haya podido llegar a la presidencia de los EEUU con un estilo tan barriobajero y tan charrán, soltando todos los días vía Twitter - no podía ser de otro modo - toda la basura y las descalificaciones, a veces increíblemente injuriosas, que le pasan por su teñida cabeza.
    

 

Todo esto podría quedarse en simple mala leche coyuntural, pero me temo que es algo más profundo. Puedo citar hasta media docena de países occidentales que están llegando a un nivel de división nacional intolerable, empezando por los mentados EEUU, siguiendo por el Reino Unido e Italia, pasando por Holanda, Hungría y Polonia, y sin perder de vista a Alemania y a Francia que van camino de lo mismo. No hace falta decir que estas cosas acaban mal o muy mal.
    

 

Pero saben que es lo peor, lo más peor de todo, lo completamente peor del asunto. Pues que la mayoría de las veces estamos cabreados por cosas que, en el fondo, nos importan un pito.

 

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  • Descartes

    Descartes | Viernes, 02 de Noviembre de 2018 a las 21:10:31 horas

    Grandilocuente será en todo caso Donald Trump, que le pierde la bocaza, estos señores eran uno de los escritores más importante de la literatura mundial, el padre del teatro moderno y uno de los filosofos más brillantes del siglo XIX, entre otros. Una patria y unos patriotas como los que describen algunos es lo que podría producir una masacre en la frontera si el presidente USA cumple su amenaza de disparar contra una caravana con mujeres y niños en ella. El tipo de patriotas que algunos enaltecen son precisamente los culpables de que la mayoria de pueblos y naciones africanas y americanas vivan en la miseria y con sus fuentes de riqueza saqueadas por potencias coloniales de las muy patrioticas. Para muchos tener una patria digna se basa en colonizar, saquear, masacrar y esclavizar a otros pueblos. Y luego presumir de patria izando banderas llenas de sangre y podredumbre.

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  • Arcadio

    Arcadio | Jueves, 01 de Noviembre de 2018 a las 19:24:27 horas

    Para desgracia de nuestras vidas reales,nadie vive de frases hechas por grandiloquentes personajes.La triste realidad está ahí afuera,ahora mismo, por ejemplo en la frontera USA con Méjico.Estoy seguro de que todas esas miles de persona que se dirigen desde Honduras y El Salvador hacia los Estados Unidos del Norte de América en caravanas kilómetricas,cada noche piensan en los hogares que han dejado en sus países.Si hubieran tenido una patria con verdaderos patriotas,no estarían en ése camino hacia ninguna parte.Podríamos referirnos también al continente africano u otros lugares del mundo...tener una patria digna,es tener una vida digna.

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  • Descartes

    Descartes | Lunes, 29 de Octubre de 2018 a las 18:46:36 horas

    “Cuando pienso en todos los males que he visto y sufrido a causa de los odios nacionales, me digo que todo ello descansa sobre una odiosa mentira: el amor a la patria.” (Leon Tolstoi)
    “Nunca se tendrá un mundo tranquilo hasta que se extirpe el patriotismo en la raza humana.” (George Bernard Shaw)
    “El patriotismo es una especie de religión, es el huevo en donde se empollan las guerras.” (G. de Maupassant)
    “Nacionalismo y patriotismo son dos de las fuerzas más maléficas que hemos conocido en este siglo, causando más muertes y guerras y destruyendo al espíritu y muchas vidas humanas de manera más masiva que cualquier otra cosa.”
    (Oliver Stone)
    “Cuantas menos razones tiene un hombre para enorgullecerse de sí mismo, más suele enorgullecerse de pertenecer a una nación.”
    (Arthur Schopenhauer)


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  • Arcadio

    Arcadio | Sábado, 27 de Octubre de 2018 a las 13:17:10 horas

    De nuevo voy a tener que estar en este asunto,a pesar de mis pesares, de acuerdo con uno de los últimos ciudadanos reconocidos oficialmente por el mundo municipalista roteño.También está el Sr. Balsa esta "on fire" con la publicación de un nuevo libro, enhorabuena.Sin duda alguna vivimos en Europa y España,no se si por costumbre histórica o porque en realidad somos diferentes,como aquel recordado slogan...siempre nos subimos a las tendencias en el último vagón de cola del trenecito.Lo hicimos muy mal ,entre comillas"con el tren de la democracia post segunda guerra mundial,lo estamos haciendo muy bién ahora despegándonos de momento de los movimientos actuales de extrema derecha europea...pero al final subiremos de nuevo a ese tren porque la unidad real y firme de cualquier país siempre ha estado por encima de personajes,personajillos,payasos y payasetes por muchos seguidores o simpatizantes que digan tener.Sólo hay que desear que "la broma",no se cobre ni una sóla vida de parte alguna.Hay mucho filósofo suelto por ahí que dice que el mundo es su patria,pero éso sólo es una falacia más y estoy seguro que la tierra en donde uno nace es la identidad que le acompaña hasta la muerte.

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