La protectora de animales "Siempre contigo" está pidiendo ayuda para Tano, el protagonista de una nueva historia cruel de maltrato animal de la que tuvieron conocimiento el pasado 13 de marzo cuando una voluntaria encontró por el camino hacia sus instalaciones, en una zona que se utiliza ilegalmente como vertedero de basura y escombro, a un bulldog francés en estado de shock.

Tano, que así se llama este perro que ha encontrado una segunda oportunidad de vida gracias a todo el empeño que está poniendo la protectora y  sus colaboradores, formaba parte de esa montaña de basura donde ladraba pidiendo auxilio.  Tenía la cabeza metida entre trozos de un inodoro roto, con tierra y en un estado lamentable. El primer reconocimiento en una clínica veterinaria fue desorientación, deshidratación, hipotermia y apenas podía mantenerse en pie; sus ojos presentaban hematomas, sobre todo el derecho, y su estado era de desnutrición. Tenía la mandíbula rota.

La protectora, centrada en el caso de Tano y hablando con otras compañeras, conoció que este era el mismo perro para el que un día antes alguien había llamado pidiendo ayuda porque se encontraba enfermo. Como tenía microchip, avisaron a la Policía Local para que se personara en el domicilio que aparecía y el "abuelo" de Tano reconoció que lo tiró al vertedero porque según él, lo creyó muerto. Según la protectora, un argumento que no se sustenta por ningún lado y menos aún cuando lo encontraron pidiendo auxilio una vez fue arrojado entre escombros. Además, la protectora asegura tener conocimiento de que días antes se había personado en una clínica veterinaria para sacrificarlo.

Los daños para Tano era considerables y precisaba de pruebas médicas como una resonancia magnética urgente de la que se diagnosticó un tumor de considerable tamaño  en la hipófisis, con pronóstico favorable si era tratado con radioterapia. Las perspectivas eran buenas si se aplicaba el tratamiento así que la protectora "Siempre contigo" decidió ponerse manos a la obra y llevarlo a las pruebas médicas necesarias para poder someterlo cuando antes a un proceso que mejoraría su salud y la reducción del tumor.

El tratamiento cuesta dinero y desde esta asociación a favor de los animales han abierto una cuenta para recibir donaciones de personas que quieran ayudar a este perro al que tiraron a un vertedero como si fuera basura aún cuando está lleno de vida.

El lunes  26 empezó el tratamiento de radioterapia de 11 sesiones y va progresando notablemente.  La protectora de animales quiere dejar claro que si se ha tirado hacia adelante con el tratamiento es porque hay plena seguridad de que Tano recupere su calidad de vida, siempre basándose en las opiniones de los médicos profesionales.

De momento, Tano  está con Ana, una mamá de acogida de Cabra (Córdoba), a la espera de recuperarse y buscar una segunda familia, ya que el tratamiento debe hacerse en esta localidad cordobesa y  desplazarse desde Rota era inviable para el perro y costoso. Este bulldog francés estará en esta casa de acogida mientras dura la radioterapia, luego habrá que buscarle un nuevo hogar.

El dinero del tratamiento asciende a  3.872 euros la radioterapia, más el coste de la resonancia magnética y las ecografías que son 647,45 euros; más los gastos que aún no se han concretado por su ingreso del 13 al 21 de marzo. Tano necesita de la solidaridad de personas que quieran contribuir con su tratamiento. La protectora ya ha recibido muchas donaciones, mucho o poco, todo viene bien, y anima a aquellos ciudadanos comprometidos a aportar su granito de arena.

Los interesados pueden dejar su aportación anónima o si prefieren dando su nombre, en la cuenta de "Siempre contigo":

BBVA  ES71 0182 3248 70 0201538561

Código BIC: BBVAESMMXXX   para Fuera de España.

Las clínicas donde han atendido a Tano son Clínica Santamaria (El Puerto Santa María). Hospital Guadiamar (Sevilla) y CIOVET, Centro integral Oncológico Veterinario en Cabrá (Córdoba).

La protectora de animales de Rota agradece tantas muestras de cariño, ayuda y donaciones y esperan poder conseguir el dinero suficiente para que Tano tenga una segunda oportunidad de vida olvidando el episodio en el que lo trataron como si fuera basura.