Pese a que a Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno inició su estación de penitencia casi convencida de que podría acabar su recorrido y que los partes meteorológicos estaban mejorando, lo cierto es que la amenaza de lluvia se hizo más fuerte y sobre la marcha se decidió acortar las horas en la calle. Fue pasadas las seis de la mañana cuando el cortejo había pasado la plaza del Triunfo y llegaba a la altura del colegio Luis Ponce de León, cuando en vez de girar a la derecha para buscar barriada San Antonio y 512 viviendas, se tomó el camino de vuelta a paso muy rápido por calle Calvario de nuevo, Veracruz, plaza Andalucía para llegar hasta plaza Barroso y volver a la iglesia de Nuestra Señora de la O.

El viento soplaba fuerte y la llegada de la lluvia era inminente, de hecho, fue entrar Jesús Nazareno en capilla y empezar a llover con lo que al menos, el cortejo ni las imágenes se mojaron. Muchos roteños se quedaron con las ganas de verlo pasar por zonas que este año se recuperaban y estaban contempladas en el recorrido como la avenida Príncipes de España, barriada de las 512 viviendas, parroquia del Divino Salvador o María Auxiliadora, pero al menos, aunque fue menos horas, se pudo disfrutar del Señor de Rota por las calles de la villa.

A las ocho de la mañana, la Madrugá había terminado en Rota y Jesús Nazareno y María Santísima de la Amargura estaban en su capilla resguardados y abiertos a recibir la visita de cofrades y devotos durante todo el año. Esta ha sido la primera estación de penitencia que se ha visto interrumpida por la lluvia en esta Semana Santa 2018.