En el conflicto que desde hace un año mantienen los trabajadores del aeropuerto de la Base Naval de Rota con la concesionaria del servicio, Louis Berger Aircraft Services (LBAS), Inc, en el que hasta ahora no ha habido novedades pese a los encuentros políticos, los requerimientos formales a la empresa, a autoridades españolas y a militares norteamericanas, Izquierda Unida ha decidido dar un paso más.

Para ello van a  elevar a pleno una moción en la que plantean quizás algo novedoso en una ciudad como Rota que ha presumido siempre de las buenas relaciones entre la comunidad española y la americana y sobre todo, entre los representantes de uno y otro lado a nivel institucional. Y es que los izquierdistas, hartos del ninguneo de las  autoridades extranjeras norteamericanas a las que critican que ignoren los requerimientos de los trabajadores, de la Corporación municipal y del propio alcalde de Rota, Javier Ruiz,  van a proponer que se paralicen temporalmente las relaciones institucionales con las autoridades tanto políticas como militares representantes de EEUU, mientras que no haya un desbloqueo del conflicto, entendiendo que este no es sólo un conflicto laboral sino con trasfondo político y de soberanía nacional.

Izquierda Unida recuerda en su moción que la Comisión Política que se creó en Rota formada por todos los partidos con y sin representación municipal de la localidad para tratar asuntos que se consideren de Estado, como precisamente los relacionados con la Base Naval, ha llevado a cabo algunas acciones iniciales.

Entre ellas, se acordó solicitar mantener encuentros y reuniones con la propia empresa, con el  Comandante de las Actividades Navales de EEUU en España, con el Secretario de Defensa, con el Almirante Jefe del Arsenal de Cádiz y con el vicepresidente de la Junta de Andalucía. Pues bien, aquellos contactos iniciales hasta ahora han tenido los siguientes frutos: la empresa Louis Berger no ha respondido hasta la fecha al requerimiento; el Secretario de Defensa comunicó que habían remitido la carta enviada a la Consejería de Empleo, Empresas y Comercio de la Junta de Andalucía, por entender que es un asunto de su exclusiva competencia. Santiago Ramón González Gómez, Almirante Jefe del Arsenal de Cádiz, sí les recibió y pudieron exponerle de primera mano los pormenores del conflicto. Desde la Vicepresidencia de la Junta de Andalucía se pusieron en contacto con el Ayuntamiento para recabar datos relativos al conflicto; y  Michael D. Macnicholl, Comandante de las Actividades Navales de EEUU en España, no sólo no ha respondido a la solicitud de mantener un encuentro con los portavoces políticos y una representación de los trabajadores, sino que tampoco ha contestado a otra solicitud posterior del propio alcalde de Rota.
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Ante esta situación, Izquierda Unida plantea que la Corporación municipal y políticos locales tienen que hacer valer su dignidad y por tanto, romper de forma inminente las relaciones institucionales con las autoridades políticas y militares norteamericanas mientras no se dignen a reunirse con los representantes políticos locales y con los trabajadores de la empresa Louis Berger. Además, la moción recoge que se dé traslado de este acuerdo a la Consejería de la Presidencia de la Junta de Andalucía y a los ministerios de la Presidencia  y de Defensa del Gobierno central, así como a la Embajada de los EEUU en España y al Comandante de las Actividades Navales de EEUU en la Base Naval de Rota.

La ruptura temporal de las relaciones supondría la negativa a recibir la visita de cualquier representante americano en la Base Naval, así como no acudir por parte del Ayuntamiento a ningún encuentro o acto oficial, institucional… dentro del recinto militar, mientras tanto no respondan a los asuntos cursados el pasado día 22 de septiembre de 2017 en el que se pedía que cesaran las suplencias por parte de los militares norteamericanos de los trabajadores en huelga y que intermediara con la empresa Louis Berger para que vuelva al status quo existente en el momento de iniciarse las negociaciones, readmitiendo a los trabajadores despedidos y anulando los expedientes sancionadores.

Desde Izquierda Unida consideran que la Corporación municipal  "tiene la obligación de enarbolar las banderas de la dignidad y el orgullo y ser el referente para toda su ciudadanía. Frente a las actitudes y valores materialistas que encarna una empresa norteamericana que se afana sólo por lograr pingües beneficios a costa de castigar a los trabajadores roteños, tiene que levantarse esta Corporación, todos a una, para hacerse respetar y mantenerse fiel y firmes a sus principios de defensa de los derechos y valores democráticos como la justicia, las libertades, la unión, la solidaridad…hacia sus representados".

IU recuerda que en el conflicto de los trabajadores de a Base Naval de Rota se están conculcando los derechos de la plantilla que aún en huelga, tiene que ver cómo sus puestos son suplantados por militares norteamericanos, boicoteando la medida de protesta amparada por la Constitución. Una vulneración de los derechos laborales que según este partido, debe tener consecuencias para la empresa. De ahí esta propuesta y su confianza en que la Corporación la apoye en el próximo pleno.