El proyecto en el que trabaja desde abril del año pasado la ONG de Rota "Humildad y Caridad" para que la localidad cuente con un comedor social que ayude a aquellas personas que viven en la calle o no tienen recursos para cubrir sus necesidades más básicas de aseo y alimentación, continúa dando pasos.

Aunque no son tan ágiles como quisieran sus impulsores, lo cierto es que en el camino se han topado con la gran suerte de contar con la colaboración estrecha del Departamento de Explosivos de la Base Naval de Rota, comando EODMU8, que desde que tuvieron conocimiento de la idea y de la labor que llevaba a cabo esta asociación local, ahora convertida en ONG, decidieron implicarse al máximo. Tanto es así, que desde hace nueve meses, un grupo de entre 20 y 25 militares norteamericanos e hispanos, se coordinan y organizan para estar dando el callo cada vez que desde "Humildad y Caridad" se les pide colaboración.

Fundamentalmente, en todo este tiempo, las labores se han centrado principalmente en acondicionar el interior del local, cedido por una familia de Rota de forma gratuita, para que la ONG diera curso a su proyecto de comedor social.  Dado que este estaba algo descuidado por el paso del tiempo sin uso, los socios y colaboradores de "Humildad y Caridad" y el Departamento de Explosivos de la Base Naval se han afanado en trabajos de obra menor y acondicionamiento como arreglos de albañilería, arreglo de grifería, limpieza de escombros,  pintura, etc. Todo lo que hace falta para ir dando otra cara a un local situado en la avenida San Fernando 73, que en un futuro a corto plazo, se estima que sobre mayo de este año, podría estar en funcionamiento.

Rosario Cárdenas, presidenta de la ONG, agradecía ayer viernes de manera pública toda la colaboración encontrada en este grupo de militares del Departamento de Explosivos que tras conocer la labor de la entidad en la Navidad de 2015, cuando recogían juguetes para los niños de familias sin recursos, decidieron adoptarla y colaborar estrechamente para ayudarles a sacar adelante sus proyectos. Dado que el más inmediato era el del futuro comedor social, no hubo dudas, y se pusieron manos a la obra. Y  nunca mejor dicho porque entre material y mano de obra, están logrando sacar adelante esta iniciativa pensada para personas que no tienen dónde ir para comer o asearse, lavar su ropa, etc. Y es que como ya contó a Rotaaldia.com  la presidenta de la ONG "Humildad y Caridad" en su día, este comedor dará comida, pero contará con un baño para el aseo personal e incluso un espacio para poder lavar también la ropa. 

Ayer, era un día importante en este camino, ya que el grupo del Departamento de Explosivos de la Base Naval, liderado por Jaime Ibarra, que fue el precursor a la hora de involucrar a su capitán y su comando en esta ayuda solidaria,  entregaba una donación de 250 euros que se destinará a la construcción de la rampa de acceso para personas con movilidad reducida, además de pagar la correspondiente licencia de obra menor que necesitan. En este grupo, en el que también está Fernando Escobar  que ejerce de traductor, Sean Burke que organizó el desayuno solidario mediante el que se ha recaudado la donación entregada gracias a los donativos de las personas que asistieron y que desayunaban a cambio de una aportación que podía ir de 1 euro en adelante, y Christopher Harris que se encarga de coordinar los trabajos, existen otros veintitantos militares encantados de echar una mano en un proyecto social como este.

Tal y como contaba Jaime Ibarra en nombre del departamento del recinto militar involucrado, son un grupo de personas, la mayoría con destino en Rota para 2 ó 3 años, que quiere colaborar en la ciudad que les acoge  y de hecho, sus aportaciones con la ONG "Humildad y Caridad" no han sido las únicas, también han colaborado con los niños bielorrusos y saharauis que pasan el verano en la localidad, con la Asociación de Discapacitados, y en campañas de recogida de ropas, comida o juguetes, así como con el Hospital de Jerez en el área de niños con cáncer.  Su mayor ilusión, es que en mayo, antes de que termine su destino en Rota, poder ver abiertas las puertas de un comedor en el que están trabajando concienzudamente.

Una implicación que la presidenta de la ONG quiso agradecer a ellos y a todos los empresarios y personas anónimas que están haciendo aportaciones constantes para que este proyecto y otras ayudas de entrega de comida salgan adelante.

Ahora, entre sus necesidades más urgentes está la de encontrar sillas y mesas para el comedor, el pasamanos para la escalera, una mesa para personas con movilidad reducida,  instalar la cocina industrial con la que ya cuentan,  o albañiles que puedan echar una mano, por lo que hacen un llamamiento a la colaboración de aquellas personas que quieran aportar y ser partícipes de este proyecto que todos esperan ver terminado en pocos meses.