El interés de que Rota cuente con un mapa de antenas de telecomunicaciones en la localidad para su posterior estudio por la localización de cada una de ellas se dejó ayer sobre la mesa en el pleno municipal por parte de Sí se Puede Rota que recordó al gobierno local el compromiso que adquirió el pasado 19 de noviembre en este sentido.

Dado que han pasado más de dos meses y este grupo municipal no tiene conocimiento de que se esté haciendo nada, el concejal Moisés Rodríguez insistió en la necesidad de dar curso a la propuesta que salió aprobada de la sesión plenaria para que esta no quede en un cajón. De momento, según ha señalado el representante de Sí se Puede en el Ayuntamiento, Rota cuenta, como se recoge en la web oficial del Ministerio de Industria, con un total de 46 localizaciones distintas, que albergan 110 antenas  repetidoras de telefonía repartidas entre el municipio y Costa Ballena. De ellas, 21 están instaladas en terrenos municipales, concretamente en el Punto Limpio, en el estadio "Alcalde Navarro Flores", en el "Arturo Puntas Velas" y en el polideportivo municipal, aunque podría darse el caso que junto a  estas antenas legales se sumaran otros elementos, aprovechando los mástiles ya legalizados.

Según la agrupación política, la problemática de Rota, con la base militar conjunta España-EE UU en su territorio, "hace que sus habitantes convivan con una gran actividad electromagnética procedente tanto de telefonía móvil civil, como de las telecomunicaciones de las fuerzas aéreas y navales de los dos países y del escudo antimisiles", algo que para Rodríguez hace que la población roteña sea "especialmente vulnerable".

Por eso, su petición de elaborar ese mapa de antenas de telecomunicaciones para el estudio de su localización y supervisión, creen desde Sí se Puede Rota que es necesaria y sobre todo, que el Ayuntamiento tome conciencia "de una vez" y actúe según el Principio de Precaución promulgado por el Consejo de Europa, que invoca a que las emisiones sean lo más razonablemente bajas para asegurar a la ciudadanía un hábitat con riesgos minimizados.