La sexta edición del Certamen de Poesía "Ángel García López", que el Ayuntamiento de Rota convoca desde hace seis años en una clara apuesta por la literatura y la poesía, premiando la creación literaria de autores que participan no sólo a nivel nacional sino internacional, terminaba ayer con la entrega del premio al poeta, escritor y músico, José Ramón Ripoll, que se hizo ganador de esta convocatoria de entre las 559 obras presentadas.

Su poema "Espejos en el bar" fue el elegido tras un empate técnico, para alzarse con los 2.400 euros y diploma acreditativo con el que está dotado este premio que por su alta participación, nivel de obras  e incluso cuantía, se ha establecido en el panorama literario como uno de los certámenes más importantes a nivel nacional e internacional. Buena muestra de ello son los centenares de poemas que se reciben en cada edición.

Ayer, con cambio de ubicación y fecha, el VI Certamen de Poesía "Ángel García López" se presentaba distinto en las formas. El amplio y "frío" salón capitular del Palacio Municipal Castillo de Luna, reservado en la mayoría de ocasiones para actos solemnes y de macado carácter institucional, se sustituyó, como explicó la delegada de Cultura, Esther García, por una sala de la biblioteca "Poetas andaluces" mucho más pequeña y "acogedora" en la que también hay capacidad para un número bastante menor de público. De hecho, además de los miembros de la Corporación municipal, poco más de una veintena de personas entraban de público. Pese a ello, la concejal de Cultura aseguró que el sitio elegido no había sido al azar y que se había pensado como la mejor opción teniendo en cuenta que la sala lleva el nombre del poeta al que se hace homenaje con esta convocatoria literaria, es "más sencilla" y anima a tener un carácter "más íntimo y acogedor" que son características de la personalidad de Ángel García López. Por eso, a partir de ahora, será este espacio el escenario de la entrega de uno de los premios más prestigiosos a nivel literario del panorama nacional. También, como explicaba ayer Esther García, se ha establecido una fecha concreta para la entrega del galardón, de modo que esta no baile en el calendario según agenda, sino que los autores, participantes y los roteños sepan que será de ahora en adelante el 16 de diciembre cuando se celebre el acto en honor a Ángel García López. Una fecha que tampoco es fruto del azar, ya que entre otras opciones que se barajaron, finalmente se decantó por este en el que se celebra el Día de la Lectura en Andalucía.

Justificados los cambios que a priori llamaban la atención de los asistentes, la concejal se centró en lo verdaderamente importante, en hablar del poeta roteño que es protagonista de este premio de poesía destacando principalmente, su lado más humano. La delegada de Cultura explicó con todo detalle a los presentes cómo conoció en persona a Ángel García López hace unos meses con motivo de la organización de esta cita. Fue en Madrid, en el Café de Gijón de la Castellana, y de esa "cita a ciegas" se trajo un magnífica sensación donde aseguró que pudo ver a un hombre sencillo, muy humano y gran persona. La concejal se extendió contando su experiencia con el Premio Nacional de Poesía que terminó con la lectura de un poema de un amigo de Ángel, Manuel López Azorín, que este dedicó al roteño y que según la concejal, recoge a la perfección el perfil del que ayer fue por segunda vez consecutiva, el gran ausente de la cita por problemas de salud. 

Aún así, y aunque Ángel García López no estuviera en aquella sala, fue el principal protagonista de las intervenciones. También de José Ramón Ripoll, premiado en el certamen, amigo del poeta y seguidor suyo desde hace décadas, le dedicó unas sentidas palabras destacando una vez más, el carácter afable y humano de este, su obra y su forma de usar la palabra siendo maestro de muchas generaciones posteriores. En su caso concreto, Ángel lo ayudó cuando llegó a Madrid a buscarse la vida allá por el año 1974, y desde entonces lo tiene en gran estima.

El ganador, tras recibir de manos del alcalde, Javier Ruiz Arana, y de la delegada de Cultura, su correspondiente diploma y cheque con el premio, manifestó su orgullo y satisfacción por engrosar su currículo con este premio tan importante. De la misma forma, y como viene siendo habitual en ediciones anteriores, el poeta alabó la apuesta del Ayuntamiento de Rota por convocar este certamen y agradeció que se siga dando protagonismo a la palabra en un mundo tan tecnológico, principalmente a la poesía desde la que se analiza el tiempo pasado, presente y futuro.

José Ramón Ripoll habló del poema premiado que escribió cuando asistía a una actuación de cante flamenco "muy mala por cierto", en un bar de Madrid donde en un momento de abstracción y aburrimiento, comenzó a mirar los espejos que envolvían al local. Allí recibía miradas, veía la suya, buscaba otras y finalmente, aunque se fue sin haber escuchado nada de la actuación, en su mente se forjó el poema de 50 versos que ayer leyó para los presentes y que ha sido el merecedor de esta distinción.

El acto finalizaba con las palabras del alcalde de Rota que felicitó al premiado y destacó el compromiso del actual equipo de gobierno de seguir apostando por este certamen como una muestra de su interés por fomentar la cultura y la poesía. Con ánimo no sólo de mantenerlo sino de mejorarlo si se puede, Javier Ruiz ensalzó la trayectoria literaria de José Ramón Ripoll que ya en los años 80 estuvo en Rota participando como coordinador del primer encuentro de poetas andaluces.  El regidor refirió el interés que el premio suscita a nivel nacional e internacional, y se congratuló de que Rota aparezca en el mapa de los certámenes literarios de prestigio gracias a esta convocatoria.  Para finalizar su intervención, y antes de la foto de familia, Javier Ruiz animó a los poetas a seguir creando poesía durante muchos más años y participando en este premio roteño con gran proyección.