DIEZ IDEAS PARA SOLUCIONAR LA CRISIS GRIEGA

Ay, ay, ay; que volvemos a las andadas. Y todo por seguir siempre las sendas trilladas, por no abrir nuevos caminos, por no estrujarnos las mientes. Veamos la cuestión con otra perspectiva. Veamos… La verdad es que está un poco liado el asunto… En fin, ahí van unas cuantas ideas para arreglar el mundo, digo, Grecia.

1- Operación bikini obligatoria para todos los griegos. Básicamente, consiste en dejar de comer durante una semana. Todo el país a dieta. ¿Es mucho una semana de ayuno? Pudiera ser, pero ahí estaba el mahatma Gandhi, que se llevaba no semanas, sino meses enteros sin meterse un plato de arroz al curry en el cuerpo y bien bonito que parecía. Con el ahorro de la comida, se paga cualquier deuda.

2- Gigolizar a Angela Merkel. Esto es, liarla con un gigoló griego guapetón, enviarle al tipo más hermoso de Grecia, un Adonis o un Apolo del Peloponeso que interprete para la lideresa alemana el papel de capitán Salami dos o tres veces al día. Con Angela relajada, toda negociación sería más fácil, y las condiciones que impusieran los germanos comedores de chucrut, más suaves.

3- Perdón, me he equivocado en el punto anterior. Observando detenidamente a la Merkel, caigo en la cuenta de que quizás fuera conveniente enviarle no al hombre más hermoso, sino a la mujer más hermosa de Grecia. Yo creo que se iba a relajar más.

4- Que los griegos se conviertan al budismo zen. No soluciona nada, pero se pasa de todo. Ooooooooommmmmm…

5- Legalizar la marihuana. Idem. (Y lo que sobre se exporta, con lo que se consigue un doble efecto).

6- Abandonar el país por la noche. Al día siguiente el mundo entero se preguntaría: “¿dónde están los griegos?”. Y los griegos escondidos todos en Andorra. Y que arree el que llegue.

7- Que Grecia declare la guerra a Europa (y la pierda). Como todo quisque sabe, los países que pierden guerras no pagan sus deudas (Alemania es un buen ejemplo). Es más, una vez perdida la contienda, comienza a llegar la ayuda internacional para reconstruir el país. En Grecia tienen piedras de sobra para reconstruir: está llena de ruinas. Ruinas griegas, claro.

8- A la entrada de Grecia que se cambien los letreros. En vez de “Grecia”, que pongan “Suiza", verán que pronto se llena el país de dinero. Eso sí, los griegos se tendrían que teñir el pelo de rubio o de castaño para parecerse a los paisanos de Roger Federer.

9- Que todos los griegos se nacionalicen americanos y que Grecia se convierta en el quincuagésimo segundo estado de los EEUU. Los americanos tan contentos, porque el sitio es la mar de chulo para colocar bases militares. Y con los americanos, pues bueno, seguro que la deuda se les olvidaba bastante a los alemanes. Eso sí, aparte de esa, no veo muchas ventajas para los griegos (miento, el PAOK de Salónica podría jugar en la NBA; algo es algo).

10- Que la Comisión Europea, la Troika y el Banco Central Europeo no actúen como una panda de mafiosos vengativos y tengan un poco de sentido común y de piedad: al que se está ahogando no se le debe vender una cuerda de esparto al precio de un cordón de oro. Sería la mejor solución, pero no caerá, no.

PD. Con este artículo, me despido de los amables lectores hasta después del verano. Me voy a la Costa Azul; paso por Capri después; luego marcho a las Seychelles y remato en Chile para esquiar un par de semanas, que allí ahora es invierno. No creo que tenga tiempo de nada. Feliz canícula.