Quantcast
5
Sábado, 13 de Junio de 2015

Antonio Franco

[Img #47035]

 

 

 

ESPECÍMENES SOCIALES DE LA RADICALIDAD

 

 

 

 

 

Cuando empleamos la palabra “fundamentalismo”, o su aplicación al personaje que lo practica, “fundamentalista”, siempre nos viene a la mente un tipo con turbante y luengas barbas. Siempre asociamos este concepto al fundamentalismo religioso, y de manera especial al movimiento islámico. Pero también existen fundamentalistas políticos. Estos consideran sus ideales por encima de los demás. Todo lo que sea “salirse” de sus credos políticos lo consideran como “traición” a su propia tradición política. Existen a ambos lados del espectro político, tanto por la izquierda como por la derecha. Son “los elementos” radicales de cada ideología. Son especímenes sociales de la radicalidad. Resulta demasiado complicado razonar con estos personajes porque no se atienen a razones. Algunos pueden llegar a rozar cierto grado de enfermedad mental. Afortunadamente no son muy numerosos dentro de la sociedad, sobre todo si carecen de carisma para convencer y atraer hacía sus planteamientos a los demás.


En el fútbol, que no deja de ser una metáfora de los comportamientos sociales, serían los que se denominan como “ultras”. Defienden a unos equipos, practicando la violencia; van a los estadios de fútbol pero no a disfrutar del juego. En realidad, a veces creo que ni siquiera ven el partido.

 

Volviendo a los fundamentalistas políticos, no son muchos pero existen. Si no están organizados  “muestran sus credenciales” a través de comentarios en artículos de opinión, en notas de prensa, en reportajes periodísticos... escondidos tras un nombre falso. No se identifican porque, en el fondo saben que su forma de pensar no es compartida por la mayoría y ello le produce cierto complejo. Además son conocedores de esa falta de carisma a la que antes hacía referencia. El tener que vivir en una comunidad, donde la mayoría “pasan olímpicamente” de sus credos políticos, hace que sean personas infelices y frustradas. Es muy probable que hayan tenido algún trauma juvenil o hayan adulterado su mente con una lectura monotemática. Han adquirido, por tanto, un  pensamiento absolutista. En cierto modo, son patéticos en el sentido más funesto del término. Algunos practican la violencia física. Otros, la violencia verbal.


Otra característica que los identifica es la falta de solidaridad. Al pensar que todos están equivocados menos él y los que piensan como él, considera enemigos al resto y, por lo tanto, no les merece la más mínima atención por su parte. Incluso pueden llegar a portarse como auténticos déspotas con sus  vecinos más cercanos.
Muchos se consideran revolucionarios que quieren cambiar el mundo, sin cambiar ellos antes. Necesitan una “revolución interior”, que viene a ser algo así, como unas sesiones con un profesional de la Psicología.
Lo peor que se puede hacer es darles publicidad, darles a conocer, porque entonces adquieren cierta relevancia, que es, en el fondo, lo que pretenden.
Salud.
 

 

Comentarios (5) Comentar esta noticia
Comentar esta noticia

Normas de participación

Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.

Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.

La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad

Normas de Participación

Política de privacidad

Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.10

  • Durruti

    Durruti | Martes, 16 de Junio de 2015 a las 18:39:53 horas

    No entiendo que nadie se tomase de forma personal mi comentario, a no ser que se tratase del mismo general genocida Mola ó de algún descerebrado que defendiese su despreciable legado criminal. Claro que hay gente para todo, incluso para autohalagarse a sí mismo, cambiandose de seudónimo. Es diáfano que nadie que sea supuestamente gente de bien y que no defendiese o justificase la figura de un criminal genócida como el tal general Mola, se debería sentirse ofendido y menos interpelado por el comentario. Allá cada cual con sus interpretaciones y su coeficiente intelectual.

    Accede para responder

  • La Pasionaria

    La Pasionaria | Lunes, 15 de Junio de 2015 a las 20:33:12 horas

    Pues este Mola me mola. Y este Durruti tiene el cerebro durrutío, se habra creido que con lo que ha dicho contesta al Mola que mola.

    Accede para responder

  • Mola

    Mola | Lunes, 15 de Junio de 2015 a las 20:06:31 horas

    El camarada Durruti confunde el culo con las témporas, muestra de su singular inteligencia. Se deduce que piensa que todos los Rodríguez o Garcías, por el mero hecho de apellidarse así son de la misma cuerda, ¿se lo aplicas a Franco?. Te has cubierto de gloria, majo. Eres otro de esos demócratas de salón que no admiten una discrepancia, y, por lo que dejas para leer entre líneas confundes adversarios con enemigos, por lo que debes pertenecer al CRH (Club de la Revancha Histérica)

    Accede para responder

  • Durruti

    Durruti | Lunes, 15 de Junio de 2015 a las 18:30:04 horas

    El personaje deleznable conocido como Emilio Mola ha sido imputado postumamente por delitos de detención ilegal y crimenes contra la humanidad. Siendo este miserable asesino el que dirigia las famosa quinta columna, dejando un rastro de muerte a su paso, asesinando a gente desarmada e indefensa, solo para dar ejemplo y sembrar el terror. En resumen un hominido de lo peor de la raza humana, un vil y cobarde asesino. Todas las criticas que vengan de personas similares o afines a este personaje, no son sino halagos y piropos para cualqueir democrata y hombre o mujer de bien. (elcadarmaduroxidada)

    Accede para responder

  • Mola

    Mola | Lunes, 15 de Junio de 2015 a las 11:05:27 horas

    Nunca había visto a nadie autodescribirse con tal exactitud como lo hace Franco en el artículo que ha perpetrado para su publicación en Rota al Día. Abunda el camarada Franco, para darse a sí mismo la razón, que todo los que no estén de acuerdo con él están contra él (alguien dijo algo así hace algún tiempo) Infelices, frustrados, con traumas juveniles, patéticos, son algunas de las lindezas con las que obsequia al personal a quienes osen criticarlo. ¡Vivan los demócratas!¡Franco, Franco, Franco!

    Accede para responder

Con tu cuenta registrada

Escribe tu correo y te enviaremos un enlace para que escribas una nueva contraseña.