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Sábado, 25 de Abril de 2015

Balsa Cirrito

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PROHIBIDO PROHIBIR

 

 


Hay una frase de la escritora inglesa Evelyn Beatrice Hall que se cita muy a menudo y que se suele proponer como definición de la tolerancia: “Detesto lo que dices pero defendería hasta la muerte tu derecho a decirlo”. Pues bien, nos hallamos en una época en la que - como casi en todas - se ha vuelto a poner de moda la primera parte de la frase, detesto lo que dices, pero en la que se evita tanto como se pueda cumplir la segunda, la de defender el derecho a decirlo.


Lo que me preocupa es el amplio, constante y agrio empleo de esa intolerancia por sectores que consideramos progresistas. Que la extrema derecha era intolerante ya lo sabíamos. Que la extrema izquierda también, tampoco era un secreto. Pero el deslizamiento del progresismo hacia esa intolerancia me produce tristeza y estupor. Siempre me he considerado eso, progresista; ¿será que no lo soy?


Me irrita el hecho de que se insulten o descalifiquen las ideas ajenas. Muchos, por lo que veo, suponen que tener ideas avanzadas es una obligación, y que quien no las defienda casi no merece vivir en este mundo; lo cual, además de intolerante, resulta aburridísimo: me encanta que haya gente con pensamiento conservador, incluso retrógrado (siempre y cuando no sea un grupo demasiado numeroso ); proporcionan un enorme colorido al universo de las ideas, donde la uniformidad es el mayor pecado.


Un ejemplo. Hace un par de meses, los modistos Dolce y Gabbana, afirmaban en una entrevista que se encontraban a favor de la familia tradicional y en contra de la adopción de niños por parte de las parejas homosexuales. Dolce y Gabbana, que como saben ustedes son gais, fueron de inmediato masacrados mediáticamente. El furor y la cantidad de críticas que cayó sobre ellos no se recordaba desde las peores tardes de Curro Romero. En fin, me parece mal semejante aluvión, pero todavía eso podría considerarse aceptable. Lo que me resultó rayano en el nazismo, concretamente del sector goebbelsiano, es que algunos iconos gais, como Elton John, pidieran públicamente el boicot a las tiendas de Dolce y Gabbana. Es decir, hay que acabar con ellos. O sea, o eres superguay o te arrojamos a la hoguera. Y eso que las declaraciones de los modistos italianos habían sido realmente ponderadas y razonables. (Por supuesto, si esas mismas declaraciones las llega a realizar alguien no perteneciente al lobby gay, habría sido directamente decapitado). Realmente, y hablo ahora por mí, el derecho de los gais a contraer matrimonio me parece incontestable, al tratarse de un acto libremente ejercido por dos individuos adultos y que no afectan a terceros. Pero la adopción, evidentemente, es un asunto muy diferente.

 

En mi caso, me encuentro a favor, pero muy ligeramente y con muchas dudas (de hecho, el no tener dudas a este respecto sí que me parecería un pensamiento descerebrado) y, por supuesto, entiendo que haya personas que no estén de acuerdo. Pero hemos pasado, en el corto plazo de cuatro o cinco años, del punto en que casi nadie considerara ese tipo de familia una opción, a que se convierta en un mandamiento de la corrección política.


Otro caso (no voy a poner muchos para no hacerme muy pesado). Hace ocho o diez meses, una autora italiana Costanza Miriano publicó un libro titulado Cásate y sé sumisa. Las mayoría de las ideas de la autora, lo digo por delante, me parecen muy desafortunadas (aunque otras muchas sólo son pintorescas, sin resultar ofensivas para nadie). Básicamente, Costanza Miriano pretende volver al modelo de mujer habitual hace sesenta años. Nos pueden parecer mal las propuestas de la escritora, podemos criticarlas (por más que la inmensa mayoría de quienes critican el libro no lo hayan leído), podemos decir que está más desfasada que la tarta al whisky. Pero pedir, como han pedido PP, PSOE, IU y montones de asociaciones feministas, que prohíban el libro me parece mucho más grave que el contenido de la señora Miriano. La referida señora Miriano está en todo su derecho a defender un modelo de mujer; coartarle su libertad para defenderlo es lo que siempre he llamado fascismo.
Porque hay algo que muchos progresistas no parecen entender. Actuando así, arrojan piedras sobre su propio – nuestro propio – tejado. En el siglo XVIII, uno de los escritores más influyentes de nuestra historia y que mayor bien hayan hecho a España, el fraile Benito Jerónimo Feijoo, se hallaba inmerso por entonces en innumerables polémicas con los sectores más reaccionarios y conservadores de nuestro país, que lo criticaban con ferocidad. El motivo: Feijoo, atizaba contra las supersticiones, la incultura, las falsas devociones, los injustificados privilegios. Era, con mucho, de los hombres más avanzados y progresistas de la época. El rey de entonces, Fernando VI, forofo del escritor y creyendo hacerle un favor, publicó un decreto sorprendente: por ley, quedaba prohibido criticar las obras del padre Feijoo. Evidentemente, en este caso Feijoo era el bueno. Pero ¿qué habría ocurrido si el rey hubiera defendido a los malos? Pues para nuestros días lo mismo. En materia de ideas, lo único que debería estar prohibido es prohibir.

 

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  • Sota de bastos

    Sota de bastos | Martes, 28 de Abril de 2015 a las 18:07:26 horas

    ¿No me digas? Bueno siempre será mejor será eso que lo que son otros, un ejemplo de los tiralevitas, limpiabotas, mamporrero o Groom of the stool, de turno. Como tú, por supuesto que por lo visto no estás cabreado, sino muy feliz con tu cometido, pus yá sabes, sarna con gusto no pica.

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  • viriato

    viriato | Lunes, 27 de Abril de 2015 a las 16:09:35 horas

    Cirrito : te prohibo que.... ( vaya tela, otra vez llevandole la contraria al articulista!) Perdón.

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  • Zumbao

    Zumbao | Domingo, 26 de Abril de 2015 a las 22:28:15 horas

    Rey de lo que sea, se entiende que estés cabreado, porque eres un ejemplo de los papanatas que critica el artículo.

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  • Rey de Espadas

    Rey de Espadas | Domingo, 26 de Abril de 2015 a las 20:29:49 horas

    A colocolo: ¿quien te califica a tí para decidir si mi comentario está hecho en el sitio equivocado o a destiempo? Tu comentario juzgandome sin conocerme y tu intento de coartar mi libertad de expresar lo que desee, en el momento elegido, si que te califica a tí tanto intelectualmente como ideologicamente. No sé si serás el mismo que me dice luego que estaria mejor callado, pero se vé que ideologicamente no estais muy diferenciados el uno del otro. A ambos parece encantaros tratar de hacer callar a la gente.

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  • COSNTITUCION ES LIBERTAD

    COSNTITUCION ES LIBERTAD | Domingo, 26 de Abril de 2015 a las 16:18:40 horas

    Nadie dice que te puedas ir de este pais aunque para los comentarios que haces quizás estarías mejor callado. Si vas a hablar que tus palabras sean mejor que tu silencio. Y no, no nos sentimos ni corruptos ni coartados, simplemente trabajamos para que haya una sociedad mejor. De tus comentarios se deduce que te gusta poco la democracia. Espero estar equivocado. Y por supuesto se puede criticar y opinar sobre el rey y sobre todas las instituciones. Cosas de la democracia constitucional.

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  • Rey de Oros

    Rey de Oros | Domingo, 26 de Abril de 2015 a las 11:27:23 horas

    Y no podia faltar la eterna referencia a que si no nos gusta este pais que cojamos las maletas, como si el pais perteneciera solo a unos pocos, como quisieron tratar de hacer ver aquellos señores que impusieron su dictadura por la fuerza de las armas. Donde a quienes no pensaban como ellos o pasaban por el aro, se les obligaba a exiliarse o algo peor. Siempre el mismo error de poner el foco en los de fuera, sin mirar dentro de nuestras fronteras y corregir errores y desmanes. Una cosa es arriesgarse a la libertad de elegir y otra contentarse con lo impuesto. Asì no se avanza, parece ser.

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  • Rey de Copas

    Rey de Copas | Domingo, 26 de Abril de 2015 a las 11:16:23 horas

    Esta farsa de constitución nos permite escribir nuestra opinión, pues vaya gracias, al menos se cumple algo de lo que propugna, entre tanto que incumple como el derecho al trabajo digno, a la vivienda, a la manifestación, etc, claro que con un matiz, no se puede opinar del rey y eso que según esa misma farsa de constitución el pueblo es soberano, menudo cinismo constitucional. Por descontado que habrá una parte de los ciudadanos no se sientan coartados, por la simple razón que tienen el pais que desean, seguro que miles de politicos, banqueros, empresarios corruptos y demás estan encantados.

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  • Colocolo

    Colocolo | Domingo, 26 de Abril de 2015 a las 08:43:42 horas

    Rey de Bastos, cada uno tiene derecho a ser partidario, o no, de una forma de gobierno u otra. Su comentario, en el sitio equivocado, a destiempo, le califica intelectualmente, porque ¿qué tiene que ver el tocino con la velocidad?

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  • CONSTITUCIÓN ES LIBERTAD

    CONSTITUCIÓN ES LIBERTAD | Sábado, 25 de Abril de 2015 a las 19:55:23 horas

    Esa farsa de Constitución te permite escribir tu opinión, entre otras cosas. Yo no me siento sometido ni coartado y como yo creo que millones de ciudadanos. Quizás te has equivocado de país, o quizás te guste otro tipo de país. La república no da, de por si, ninguna libertad. República es Francia, con sus libertades y República también es China. Y como ves no te han "damnificado", cosas de la libertad de expresión que tiene la Constitución.

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  • Rey de Bastos

    Rey de Bastos | Sábado, 25 de Abril de 2015 a las 12:17:19 horas

    Resulta irónico que quien firma esta opinión se declare monarquico, cuando el monarca al que defiende junto a la cupula de la dictadura se encargaron de prohibir la republica, mediante el truco fullero de una farsa de constitución, trufada de contradicciones y que condenaba al pueblo al sometimiento a la figura del rey. Y esa prohibición, que por lo visto muchos sí ven bien impuesta, repercutió y repercute en millones de ciudadanos coartados en la libertad más elemental en democracia. Espero que esta humilde opinión no acabe damnificada por ningún tipo de prohibición. Un saludo.

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