El roteño Antonio Trigo triunfó el pasado fin de semana con el espectáculo que llevó hasta el complejo turístico de Costa Ballena donde más de 250 personas acudieron a escuchar el peculiar sonido del grupo de profesionales que acompañan a este pianista.

Bajo el cielo de una noche espléndidamente veraniega, Antonio Trigo deleitó a un público que hasta el final estuvo entregado a la música melódica de este espectáculo que se presenta bajo el nombre de "El alma bonsai".

Antonio Trigo se muestra muy satisfecho con la acogida de este concierto en el que como peculiaridad, nos cuenta que al final de la actuación fueron muchos los vecinos de Costa Ballena que disfrutaron del concierto al aire libre desde sus balcones, los que bajaron para comprar la maqueta, "señal de que había gustado". Por tanto, el balance que hace este músico y compositor roteño no puede ser otro que positivo. "La acogida bien, como siempre, muy bien" comenta Antonio que nos adelanta que con esta actuación  pasará página para meterse de lleno en otro proyecto con nuevas composiciones "puedo decir que con el concierto del sábado cierro una etapa, paso página".

"Estamos trabajando en algo nuevo, un nuevo proyecto que va a sorprender mucho porque la idea es hacer cosas muy distintas". Aunque todavía están en lso comienzos de este nuevo trabajo, Antonio augura que seguro va a gustar y de hecho, su idea es poder volver a estrenar en el auditorio municipal Alcalde Felipe Benítez.

Aunque la crisis se deja notar en el tema de contratos para actuaciones, este roteño que siempre transmite optimismo y ganas de trabajar  manifiesta que siempre busca proyectos que le sirvan "para darle un empujón a todo esto" refiriéndose a la complicada tarea de poder vivir de la música. De hecho, algunos de sus trabajos están centrados en la realización de música para documentales para buscar otras opciones. Aunque reconoce que no hay mucho trabajo, "ya sabes como están las cosas", Antonio Trigo apuesta por la renovación y por no quedarse de brazos cruzados.    

"El alma bonsai", un espectáculo que pone en escena gracias a la participación de Lila Horovitz (contrabajo), Sophia Quarengui (violin), Francis Linares (guitarra española), David Gasca (sintetizador), Rebeca Valencia (voz) y Jose María Peña (batería) cerró su etapa, tras dos años, el pasado fin de semana. Antonio Trigo destaca el sonido del grupo como una de las características más peculiares de este trabajo en el que la fusión de instrumentos acústicos con el sintetizador crean una música global que de momento, siempre ha conseguido el difícil reto de gustar a todos.