Un trabajo de investigación y testimonios acercan parte de la historia de la Base a alumnos del Castillo de Luna
El trabajo ha concluido con la siembra de un peral en homenaje al artículo de Almudena Grandes en el que este árbol frutal cobra especial importancia con la llegada de los militares a Rota
Aunque llevan años conviviendo con la Base Naval al lado de sus casas, en su mismo término municipal, hay muchos jóvenes que no conocen la realidad de cómo se fraguó la implantación del recinto militar en la localidad, qué supuso aquello y cómo lo vivieron las generaciones a las que les tocó vivir la época. Acercarse al pasado de la Base para conocer el presente y pensar en el futuro, ha sido el eje del trabajo de investigación que los alumnos de 4º curso del IES Castillo de Luna han realizado a través de las clases de la asignatura de Historia.
Un proyecto de investigación que incluso han presentado en la Feria de la Ciencia de Granada y que les ha permitido conocer más de cerca su propia historia, la de un pueblo que cambió radicalmente en 1953 cuando llegaron los americanos.
Ayer, en el propio instituto, casi una treintena de alumnos cerraban las actividades en torno a este proyecto llamado "Las huellas de la Historia de Rota" con la exposición de este trabajo de investigación, la proyección de un vídeo en el que se recogen testimonios orales y un coloquio en el que participaron algunos de esos roteños a los que la llegada de la Base Naval les cambió la vida.
Los alumnos estuvieron muy participativos haciendo preguntas a estos seis testimonios que pudieron contar sus experiencias en primera persona, mostrando fotos antiguas, y dando así a las generacions más jóvenes, una baño de historia real y viva. No han sido los únicos pilares de este trabajo de investigación en el que ha participado toda la clase dividido en grupos a los que les ha tocado informarse por ejemplo sobre la influencia musical que trajo la Base a Rota, cómo afectaron las expropiaciones de tierras para que el recinto militar se construyera o cómo fue todo aquel proceso. Esta propuesta les ha llevado a visitar hemerotecas, archivos históricos y conocer la política de aquellos años o el modo de vida del roteño. Incluso se han estudiado algunos términos del lenguaje que sin querer y por el simple hecho de la convivencia entre personal civil español y los militares norteamericanos se han acuñado en una especie de "spanglish". Sin duda, un trabajo completo del que los propios estudiantes se sentían satisfechos porque estudiar la historia de algo que afecta tan directamente, siempre tiene un plus especial.
La actividad concluía en la jornada de ayer con la siembra de un peral en el huerto de este centro. Un árbol frutal que no ha sido elegido al azar sino que tiene que ver mucho con la llegada de la Base Naval a Rota y que se recoge en un artículo de la escritora Almudena Grandes titulado "La sombra de un peral" que viene a escenificar las expropiaciones de tierras que sufrieron los roteños de entonces. El peral, que ahora está plantado en el instituto Castillo de Luna escenifica esa necesidad y la importancia de no perder la memoria. Precisamente ese, es el objetivo de este trabajo realizado por unos estudiantes que con sus 16 años, y viviendo al lado de una Base Naval, poco sabían de la historia.
Probablemente, el trabajo de investigación "Las huellas de la Historia de Rota” continuará el curso que viene ahondando en otros aspectos significativos de la presencia militar en un pueblo como el roteño.
Artículo de la escritora Almudena Grandes: "La sombra de un peral"



































Mb | Jueves, 12 de Junio de 2014 a las 08:24:48 horas
¡Así se enseña y se aprende historia!
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