REALIDADES VIRTUALES

 
 
 
Admito que el título escogido es pura contradicción. Lo virtual es lo imaginado, lo supuesto, lo posible... hasta lo irreal. Por eso, hablar de realidades virtuales resulta una paradoja. Pero se me ocurre que en este punto de la Historia de la Humanidad que nos  ha tocado vivir, ambos conceptos se entremezclan de tal manera que es difícil distinguir lo aparente de lo auténtico.
 
No se trata sólo de pensamientos más o menos políticos-filosóficos (o viceversa), también se confunden en los asuntos más sencillos de nuestra vida cotidiana.
Por ejemplo, ¿no se había establecido en Rota una nueva superficie comercial de una marca conocida? Sí, claro que sí. Hemos visto su planta levantada en los nuevos suelos. Espera. Ahora que lo pienso, aquello fue un montaje fotográfico, una fotochop  me parece que se llama. Bueno, ni siquiera sé como se escribe la dichosa palabra. El nuevo centro comercial lo han convertido en una realidad virtual. Lo han vendido como si ya fuese una realidad.
Este es un simple ejemplo casero para explicar a que me refiero a la hora de elegir el título del presente artículo.

Otra cuestión muy casera, muy actual, muy nuestra, es la realidad virtual gubernativa.
Realmente el equipo de gobierno de nuestra localidad lo ostenta la alcaldesa. Pero, ¿no  tenemos un alcalde virtual? ¿O la virtual es la alcaldesa? Yo no sé ustedes, pero para mí, que para más inri soy concejal,  resulta todo un dilema dirimir esta cuestión.

Si me adentro en el terreno de los ideales políticos la confusión alcanza grados más elevados. Cuando escucho algún alto dirigente del PP proclamar que ellos son los defensores de los derechos sociales de la ciudadanía, me hago un tremendo lío.
Ya no sé si la pobreza ha aumentado en España o no. Ya me pongo a cuestionar si los pensionistas no llegan verdaderamente a fin de mes con la subida que el gobierno ha aplicado, y se quejan por gusto, como decimos aquí. La salida de la crisis es una realidad. Me pregunto si es una realidad virtual, sólo virtual.

En la otra banda ideológica me ocurre casi lo mismo. Si se antepone el pago de la deuda a la banca por encima del mantenimiento de políticas sociales, modificando con la derecha declarada y reconocida (esto es, el PP) la Constitución en su artículo 135, cuyas consecuencias son los recortes sufridos y el aumento de los impuestos indirectos que gravan el consumo y que, por tanto, pagamos todos independientemente de nuestro estado laboral, ¿es el PSOE realmente un partido de izquierda, o lo es sólo virtualmente?.

Si a la franja ideológica de la izquierda nos encontramos a Izquierda Unida, me pregunto por qué surgen otros movimientos de izquierdas con pretendidas intenciones de formar partidos políticos para presentarse a unas elecciones. ¿Es también Izquierda Unida una ideología de izquierda sólo virtual? ¿Quién garantiza que los aspirantes a anexionarse la franja ideológica de la izquierda no sean también realidades virtuales?

¿Es este texto un artículo de opinión real o se trata sólo de un pensamiento virtual?
Salud.