La familia compuesta por Juan Manuel de 29 años de edad, su mujer de 28 y sus seis hijos de edades comprendidas entre los 12 años y los cuatro meses, afrontarán mañana miércoles 26 de febrero la ejecución del desahucio de la casa en la que viven de alquiler desde hace nueve meses y que dejaron de pagar hace seis por no poder afrontar la renta. Sus opciones en este tiempo, desde que tras el verano Juan Manuel se quedara parado, han sido pocas y claras: elegir entre dar de comer a sus hijos o pagar el alquiler. El resultado es obvio, mañana se verá en la calle si no llega una solución de última hora. 

La situación es complicada para esta joven pareja que tal y como ambos manifestaban ayer a Rotaaldia.com, llevan seis meses en los que las cosas les han venido del revés en prácticamente todos los sentidos. Juan Manuel asegura que tras haber sido despedido de la pizzería en la que trabajaba como cocinero una vez terminada la temporada de verano, ha intentado encontrar trabajo en el sector de la hostelería al que está dedicado desde los 13 años, pero el panorama es difícil para todos máxime en los meses de invierno. Los pagos se le han ido acumulando y ha tenido que tirar de la familia, -también con escasos recursos-, de Cáritas Interparroquial y de la asociación "Saber que se puede" que les ha ayudado con la comida. Ellos les han ido suministrando los alimentos más básicos y Juan Manuel se las ha ingeniado para ir al día y que a sus hijos no les faltara el plato en la mesa. Y es que a pesar de su juventud, este chaval transmite unas ideas muy claras. Sólo pide trabajo, como el resto de personas que se encuentran en una situación similar, ya que ello le permitiría buscar otra casa en alquiler y tener un techo para sus hijos. Pero de momento, en paro y sin recursos, es difícil encontrarla y que alguien le quiera de inquilino. Una situación que entiende perfectamente pero que le agobia porque si de aquí a mañana no cambia nada, a mediodía no tendrá dónde ir. 

Tiene varios meses de cotización que le permitirían cobrar cuatro meses del subsidio de desempleo y además los 21 meses de ayuda familiar pero para ello, tiene que volver a ser contratado al menos el período mínimo que se exige para poder solicitarlas. Y esa es la clave. No encuentra trabajo y no encuentra salida a la espiral en la que está metido.

Juan Manuel, que en su conversación con Rotaaldia.com, deja muy claro que no quiere vivir de ayudas, sólo de su trabajo como ha venido haciendo hasta ahora. Este joven asegura que está en un momento complicado en el que prácticamente no se puede acoger a ninguna de las ayudas que existen para este tipo de situaciones precarias. Cuenta que ha ido en varias ocasiones al Ayuntamiento de Rota y a Sursa para solicitar alguna solución como ayudas al alquiler pero tras varias vueltas, asegura que le han dicho que no pueden hacer nada. Su situación es complicada ya que el protocolo de ayudas al alquiler del Consistorio son para rentas de casas que no superen los 420 euros y para Juan Manuel es difícil encontrar un piso de 4 dormitorios (teniendo en cuenta que son 8 miembros en la familia) por esa cantidad. Por lo tanto, ahí tiene una puerta cerrada que se suma a la de no tener nómina y estar en paro, una carta de recomendación poco fiable para ser inquilino, "así que siempre me encuentro con el mismo problema. Por eso, lo que necesito es un trabajo y que yo pueda seguir adelante. Cobrar la ayuda y dedicarla a pagar el alquiler de una casa para mis hijos y de la comida ya iré tirando a ver cómo me las arreglo, pero de momento, es que no encuentro nada", asegura un Juan Manuel que mantiene una actitud aparentemente relajada pero que está muy preocupado por su futuro y el de su familia.

Con seis hijos de 12, 8, 7, 5 y 3 años de edad más una pequeñita de cuatro meses, tiene una carga familiar importante que hace más difícil una solución.

Mañana cuando funcionarios del juzgado acudan con la Policía a desalojarlos de la vivienda en la que viven no sabe cómo actuará. Hasta ahora no ha perdido las formas en ningún momento porque asegura que no es su estilo pero reconoce que a veces, quien las pierde es quien consigue una ayuda. Entiende perfectamente la actitud del dueño de la vivienda en la que están alquilados y de la que mañana serán desahuciados, pero también pide comprensión para él. "Soy un buscavida y he tenido que elegir entre dar de comer a mis hijos y pagar la casa, todo me ha venido mal en los últimos meses porque tras quedarme parado contaba con poder coger la ayuda familiar y dedicarla a pagar el alquiler, pero cuando fui al sindicato me dijeron que ya había cogido un paro anterior y que para cobrar el que tengo acumulado tengo que volver a trabajar". Algo que considera una paradoja.

De momento, y tirando de la administración más cercana, hoy tiene pensado acudir al Castillo de Luna, sede del Ayuntamiento de Rota, y no moverse de allí, asegura a Rotaaldia.com, hasta poder hablar con la alcaldesa y exponerle su dramática situación para buscar una solución. "Sólo necesito una ayuda, un empujón y ya saldré yo adelante buscándome la vida" ha manifestado este joven padre de seis hijos que como otros tantos, se ha visto afectado por la crisis y el desempleo.

Juan Manuel y Paula han hecho todo lo posible para que sus hijos no se den cuenta del drama que están viviendo y no sufran "¿qué quieres que le diga a mi hija pequeña, que su padre no puede tener una casa para ella? ¡Que me digan a mí cómo se dice eso a un hijo!" ha lamentado.

La pareja insiste en que no quiere vivir de ayudas sino de su trabajo, "no quiero que me paguen una casa, sólo quiero trabajar y poder seguir aunque sea tambaleándome como hasta ahora, pero seguir adelante".

Juan Manuel y Paula llevan desde los 13 años juntos y nunca habían pasado por una situación tan dura por lo que ante el desahucio de mañana no saben ni cómo se desarrollará ni qué van a hacer. "Para nosotros todo esto es nuevo y yo sé que la culpa no es de nadie, que hay mucha gente que lo pasa mal y que no hay trabajo y que los dueños de los bares están asfixiados, pero pido al Ayuntamiento o a alguien que me eche un cable. Llevo meses buscando un trabajo y no quiero deberle dinero al dueño de la casa pero es que no he tenido otra opción. El hombre ha hecho lo normal, es comprensible, pero no me puedo ir a la calle con mis seis niños".

Mañana, si no cambia nada, Juan Manuel y Paula vivirán uno de los peores momentos que les ha tocado en estos más de 15 años juntos como pareja estable. Sólo piden poder seguir adelante.